Muchas de las decisiones “creativas” del cómic se toman atendiendo a imposiciones editoriales o criterios de marketing‚ eso está claro. Tenemos el caso de la muerte de Jean Grey, el de cambiar el traje de Supergirl para su película en los ochenta… sin duda, demasiados para contar aquí. Y‚ sin embargo‚ para que el universo que se presenta al lector sea coherente‚ todos estos cambios de dirección tienen que justificarse dentro de la historia. Cuando la cúpula editorial de DC Comics decidió reiniciar su universo‚ no podía ignorar el antiguo Multiverso como si nada hubiera sucedido. Todo el esfuerzo que tantos guionistas y dibujantes habían puesto en crear ese complejo mundo de ficción no podía perderse así como así‚ por no hablar del insulto que habría supuesto para los lectores veteranos. Y todo el que conozca el mundillo del cómic sabe cómo se las gastan los lectores veteranos.
- Los distintos mundos de DC (I): Los dos Flash
- Los distintos mundos de DC (II): Aquellos años de antes de la Crisis
- Los distintos mundos de DC (III): Crisis en Tierras Infinitas Estás leyendo este artículo
- Los distintos mundos de DC (IV): En busca del Hipertiempo perdido
- Los distintos mundos de DC (V): 52 Tierras y cien problemas de continuidad
Por eso‚ la antigua DC tenía que irse por la puerta grande‚ en una historia de proporciones descomunales que enfrentaría a todos los héroes del Multiverso contra una amenaza tan grande que no podrían derrotarla sin que algunos universos quedaran destruidos y su continuidad se reiniciara en el proceso. Esta epopeya‚ que reunió a cientos de personajes diferentes y tuvo una gran cantidad de tie-ins‚ se publicó en 1986 y se llamó Crisis en Tierras Infinitas. Y‚ 30 años después‚ sigue siendo el metro patrón para todos los crossovers de DC‚ y quizás del cómic americano en general.
El evento‚ que ya fue recomendado en esta página‚ se publicitó como una gran aventura donde “mundos vivirán y mundos morirán”‚ un lema que ha pasado a formar parte de la historia del tebeo estadounidense. Por primera vez‚ una colección principal obligó a que los autores de todos los títulos de DC dedicaran por lo menos un número a la Crisis‚ con lo que se inició un procedimiento que sigue empleándose hoy en día. Esta forma de actuar resulta bastante polémica‚ ya que resta libertad creativa a algunos autores que son obligados a dejar de lado sus tramas principales cada tres números para contar una historia irrelevante que poco o nada afectará a la serie madre. Sin embargo‚ durante este evento‚ escritores como Alan Moore integraron la trama de Crisis en Tierras Infinitas dentro de la narrativa de su propia serie‚ dando lugar a maravillas como el clímax de American Gothic.
Pero‚ entonces‚ ¿de qué demonios va el evento principal? Pues ni más ni menos que la contienda entre el Monitor‚ que lucha por preservar el Multiverso‚ y el Antimonitor‚ el villano que quiere acabar con él. Ambos existen desde que el universo principal originó las demás realidades‚ y ambos se rodearán de aliados para derrotar a su adversario: el Monitor empleará a todos los héroes de la editorial‚ mientras que su reverso tenebroso contará con la ayuda del Psico-Pirata y de los habitantes del Universo de Antimateria‚ que desean eliminar las demás realidades.
Cabe destacar que Wolfman mantiene la preocupación por la continuidad de la que hablábamos en el primer artículo‚ y no se saca nada de la manga‚ sino que utiliza elementos tan dispares como el guardián renegado Krona o un universo de Antimateria que ya había aparecido en otras colecciones para dotar a su historia de consistencia y hacer un guiño a los lectores veteranos. En este sentido‚ el inicio del tebeo es magistral: se nos muestra cómo el universo de Tierra-3‚ en el que existen las versiones malignas de la Liga de la Justicia‚ es consumido por la antimateria. Aunque sospecho que estas escenas no destacarán precisamente por su rigor científico‚ eso no les resta ningún mérito. Recapitulemos: existen unas versiones malvadas de la JLA. Les costó lo suyo vencerlas en el pasado. Y‚ ahora‚ algo ha conseguido exterminar su universo sin esfuerzo. Un gran cebo para que los lectores no despeguen los ojos del papel.
Sin embargo‚ a pesar de este respeto por la continuidad de DC‚ los responsables del evento no pudieron evitar eliminar algunos elementos que no podían formar parte de su nuevo y maduro universo. Por ejemplo‚ algunos ayudantes del Capitán Marvel fueron masacrados‚ así como el anticuado y obsoleto Flecha Verde de Tierra-2.
Esos fallecimientos son poco importantes pero, si deseas leer la historia‚ evita estos SPOILERS.
Sin embargo‚ las dos muertes más sonadas serían las de Supergirl y Flash. Mientras que la primera fue vetada de los títulos de Superman por una norma que prohibía la aparición de más kryptonianos‚ el segundo fue sustituido por su ayudante‚ Wally West. Las otras muertes sucedieron en una sola viñeta‚ pero a estas se les dedicaron números enteros‚ ya que se trataba de personajes muy queridos de la editorial. Aparte de grandes cataclismos que resquebrajan la realidad‚ Wolfman también sabía escribir momentos emocionales como estos, y Pérez los narraba como nadie con su prodigioso manejo de las emociones. Y‚ como reflexión‚ resulta muy apropiado que el mismo héroe que nos introdujo el Multiverso muera con este. No sé si el guionista lo pensó así‚ pero fue una jugada redonda.
FIN DEL SPOILER
En todo caso‚ la Crisis terminó. Todos los universos paralelos se fusionaron en uno solo‚ las historias de muchos personajes como Superman fueron reiniciadas y alteradas de principio a fin y‚ por primera vez‚ todos los personajes de DC coexistían en el mismo universo. Esto coincidió con la llegada a la editorial de algunos de los autores más prestigiosos del cómic americano: John Byrne‚ Grant Morrison‚ Alan Moore‚ Frank Miller el propio Wolfman… algunos de ellos ya publicaban en DC antes de este evento‚ pero todos ayudaron a convertir la segunda mitad de los ochenta en la época dorada de la casa. Sin embargo‚ ¿implica esto que reiniciar el Universo DC fue una buena idea? Quizás no.
Al fin y al cabo‚ todos estos autores podrían haber escrito unas obras igualmente buenas ambientadas en la anterior continuidad. Moore lo hacía en La cosa del pantano‚ Wolfman lo había hecho en Los nuevos titanes… y Morrison demostró que su locura casaba con cualquier realidad.
Además‚ este reinicio acabó causando muchos problemas de continuidad‚ de esos que el Multiverso quería solucionar: durante años no se supo cuál era el nuevo origen de Power Girl‚ la Legión de Superhéroes tuvo que ser reiniciada para integrarse en la nueva continuidad… en definitiva‚ un lío enorme del que nadie sabía muy bien cómo salir.
Por último‚ cabe añadir que este evento fue el punto de partida de una preocupante tendencia en DC: los constantes reinicios para aumentar las ventas. Quizás por estos precedentes hemos tenido una cantidad inaudita de orígenes de Superman en los últimos quince años. No considero que sea malo actualizar a los personajes de vez en cuando, pero este es un recurso fácil que la editorial utiliza demasiado a menudo para llamar la atención de los medios especializados.
En el próximo artículo, hablaremos de cómo DC recuperó sus múltiples realidades y de las razones que le llevaron a hacerlo.
