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Opiniones sesgadas y personas hipersensibles, ¿Por qué lo incorrecto gana a lo correcto?

Desde que tuve la oportunidad de unirme a este sacrosanto blog me he dado cuenta que cada vez es más difícil expresar tu opinión sincera acerca de una película, serie, cómic o libro sin que esta sea objeto de críticas destructivas o discusiones donde cada quien se afianza más en su opinion, sobre todo cuando la tuya es contraria al común denominador. Escribir sin ofender a nadie y mantener la objetividad en el mensaje no es tarea fácil y aun cuando crees haber dominado dicho arte, siempre te vas a topar con alguien que va a estar predispuesto a la confrontación.

comic book guy pc

Parte de la culpa es la dictadura de lo “políticamente correcto”, que cada vez gana más terreno en las cosas que nos hacen felices (que da título al blog) como el cine, la televisión, el cómic y los libros. Además no es un fenómeno nuevo, lleva años ganado cada vez más protagonismo en Internet y eventos. En gran parte esto se debe a los llamados usuarios Troll, las noticias con títulos sensacionalistas y exagerados que solo buscan obtener visitas a cualquier coste, y es alimentado por las personas ridículamente sensibles a cualquier comentario. Al parecer solo necesitas una cuenta en cualquier red social y mucho tiempo libre, para expresar tus razonamientos “superiones” a los cuatro vientos si alguien se atreve a cuestionar algo que a ti te gusta.

La pregunta importante detrás de este artículo es ¿realmente podemos escribir de lo que nos gusta o nos desagrada sin ofender a nadie?

La respuesta corta y simple a esta pregunta es un rotundo no.

picard facepalm

¿Cómo deberíamos manejar la situación a pesar de saber que nuestra opinión probablemente va a generar polémica? Siempre tenemos que darla, no podemos callarnos por si ofendemos a alguien. Una de las razones fundamentales para decirla y no callar, es que si no lo haces atentaría contra tu libertad de expresión y pensamiento. Esto es algo que todos debemos cultivar, como ya lo dijo Fernando Vilchez en su artículo acerca del origen del odio-amor que genera Christopher Nolan. Una idea, película, libro, cómic etc. La que sea, siempre va a tener dos audiencias: Quienes la aman y quienes la odian.

Entonces, es obvio que siempre va a haber alguien que se sienta ofendido, no importa el contenido del mensaje. Aunque tengas las mejores intenciones, es muy probable que tu opinión sea secuestrada por la policía del pensamiento y convertida en un monstruo totalmente distinto.

Para tratar de una forma hábil e impecable de expresar tu opinión, ya sea en un artículo o simplemente en un comentario acerca de lo expuesto por alguien más, no solo debes tener en cuenta a quienes tienen opiniones contrarias a la tuya, sino a cualquier persona que pueda sentirse ofendido por la forma en que decidas expresarlo. A veces no es lo que dices, sino la manera en que lo dices, incluso una combinación de palabras al azar en un párrafo puede ser objeto de molestia para alguien con la sensibilidad a flor de piel. Al final, el primer eslabón de la cadena de censura de lo políticamente correcto termina siendo uno mismo, irónico ¿no?

tom cruise risa

Me atrevo a afirmar que el enfoque de lo políticamente correcto que más polémica genera en los últimos años es el tratamiento e importancia que reciben las minorías en la cultura popular. Cada vez se hace más común que al emitir una opinión acerca de características tan básicas como, color de piel, preferencia sexual, género, nacionalidad e incluso rol en la sociedad, esta puede ser considerada políticamente incorrecta si quien lo dice no es parte de la característica que cuestiona. Lo que ha dado pie a que mucha de la información que llega a nosotros sea sesgada o carezca de sentido, ya que debe valerse de una gran cantidad de eufemismos y reglas que terminan por complicar o parcializar lo que se quiere exponer.

A continuación un ejemplo.

Lamentablemente las minorías tienen un rol protagónista cada vez más grande en la sociedad actual, por eso los cómics y las películas adaptan sus personajes para complacer.

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Lo ven, eso es una oración políticamente incorrecta de principio a fin, y esto se debe a la manera en que fueron interpretados los derechos y deberes en las distintas sociedades de hoy en día.

Si desde un principio las sociedades hubiesen dedicado sus esfuerzos en llegar a un acuerdo global acerca de los derechos universales e inalienables de cada individuo, en esa época en la que la información no llegaba a nosotros con la rapidez que brinda Internet y la cobertura de las redes sociales, actualmente no serían motivo de escándalo ciertas características y costumbres que definen el comportamiento y las opiniones de cada individuo. No olvidemos que estas opiniones normalmente salen de un contexto, país, creencias y valores distintos al de los receptores. Estas opiniones radicales según quien lo lea, son utilizadas en nuestra sociedad virtual para reforzar un punto de vista, ya que para el común denominador tu reputación virtual es tan importante como tu vida diaria.

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En el mejor de los escenarios, si debido a las características que te definen encajas en un perfil específico de la cultura popular, este no debería condicionar tu libertad de expresarte ni ser utilizado a conveniencia para exponer o reclamar tus derechos y deberes. Sin lugar a dudas, si todos utilizáramos el sentido común y la capacidad de razonamiento, al cuestionar una opinión que atenta contra lo que tienes por experiencia de vida, nos evitaríamos el estar plagados de eufemismos que han sido creados por el temor de ofender a otros.

De esto nos quedan dos cosas

Primero: Ningún extremo en el contexto es bueno, y a veces se debe perder la batalla hoy para ganar la guerra mañana

Segundo: La forma en que se está manejando la corrección política está muy lejos de ser una solución al problema. Total, al final la idea es que todo individuo se sienta con los mismos derechos, y esa disposición está internamente en nosotros. Las cosas impuestas por obligación no complacen ni satisfacen a nadie.

joker aplauso

¿Hasta ahora todo claro? Perfecto. Ahora vamos al otro lado del problema.

En la sociedad mediática que nos tocó vivir, la polémica, la exageración, la crítica destructiva y los rumores venden. Cuando me refiero a que venden es porque los artículos con títulos políticamente incorrectos son los más visitados en cualquier web, red social o medio impreso. Al parecer muchos se tomaron en serio esta frase:

“lo importante no es que hablen bien o mal de ti, sino que hablen de ti”

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El problema está que los artículos donde se habla “bien” o se hacen elogios de una película, serie… al parecer no son tan divertidos ni visitados como los que critican y desprestigian algo. ¿Acaso lo que queremos como sociedad es ver al mundo arder y profesar que el obrar mal es más divertido que el bien? Particularmente me encanta el mal en la ficción, pero no cuando alguien lo toma como filosofía de vida aunque sea virtual. He visto como Internet está plagado de test que determinan si tienes algo de sociópata en tu conducta, y al parecer a algunos les resulta divertido comprobarlo. Noto con preocupación que para hacerte un nombre en una comunidad virtual te debes expresar con negatividad, crítica destructiva y la predisposición a que todo lo que no refuerza tus gustos personales es malo o cutre.

funny jin carrey

Reconozco que hay personas que saben sacarle provecho a ser políticamente incorrectos y han logrado ser exitosos por su humor negro, el problema está con la gente que se desgarra las vestiduras cuando estas personas tocan alguna fibra sensible que los afecta. Para concluir mi recomendación es que cuando nos atrevamos a expresar nuestra opinión seamos un poco críticos acerca de si estamos anteponiendo un falso moralismo en nuestros argumentos. Por otro lado debemos atrevernos a ser políticamente incorrectos, porque aunque probablemente alguien se va a ofender, esto no quiere decir que tenga razón.

Un saludo, sed felices y sinceros

Gabriel A. Escobar S.
Gabriel A. Escobar S.
Ing. en Informática, Músico Aficionado, Adicto al Café, no necesariamente en ese orden. Entusiasta del mundo del cine, las series de televisión, el Comic, los libros y relatos de Ciencia Ficción.
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4 COMENTARIOS

  1. Gabriel compa. Tu y yo nos entendemos. Anda que no me han caído piedras por mencionar mas de una vez que películas como El padrino no me parecen para tanto o que Incepción de Nolan me parece estúpida en su forma de plantear los sueños o inclusive algo reciente como el no haberme gustado para nada El cuento de la criada,serie soporífera y manipuladora y sensacionalista donde las haya. Pero es solo una opinión acorde a mis gustos y perspectiva , mi palabra no va ha misa ni es suprema, a lo mejor el que tiene mal gusto y esta equivocado soy yo. ja ja y creo que no se me caera el mundo encima por ello. Pero la era de la información es lo que tiene, Fanboys vs Haters y NADIE esta contento nunca con nada. Ejemplo mas reciente si cabe aun, el estreno de The Defenders, que no a podido causar mas división porque no se puede y yo con toda honestidad no se que esperaban. El narcisismo que impera en nuestra sociedad es cuanto menos preocupante, ¿ y para que? si al final todos vamos a acabar igual. Saludos compa.

    • Solidus!

      En efecto, lo que quería plantear es esa inconformidad guion narcicismo guion hipersensibilidad como diría Zoolander (película que es malísima pero me hizo reír un montón) que a veces nos convierte en víctimas o victimarios con cosas que a la larga no van al caso. También en parte por lo fácil que es criticar y lo difícil que es darle crédito a alguien cuando ha hecho un buen trabajo. Con el tiempo me he dado cuenta que mientras más sabes menos entiendes y que el gusto es subjetivo, que necesitas la variedad para apreciar las cosas y ser abierto en tus criterios.

      Por ejemplo, yo nunca había visto Kingsman: El servicio secreto, a juzgar solo por los cortes y el tráiler no me llamaba la atención, este fin de semana le di la oportunidad y me ha parecido buenísima, y así deben existir mil cosas que por prejuicios o un criterio limitado no he disfrutado.

      Gracias por tus comentarios!

  2. Muy buenas, artículo realmente interesante. Desde mi punto de vista a esa “cadena de guiones” le falta un adjetivo que campa a sus anchas por la red…intolerancia, que está muy relacionado con el de narcisista, es decir, aquello que es lo mejor para mí ha de serlo para el resto y de no ser así, su opinión no vale nada, no tiene buen gusto, etc…
    Puede ser debido a que estar tras una pantalla hace que se pierda casi toda posibilidad de empatizar con el prójimo…somos una “unidad” en nuestro puesto, que ha de ser inquebrantable, inmutable e incorruptible, a la vez que poseedora de la verdad absoluta.
    También está el hecho de que muchas veces aquella opinión que no va con el “sentir general” del resto se considera automáticamente como “políticamente incorrecta”, en una clara tergiversación de lo que significa la expresión…y como bien comentas, pasamos a una lucha de extremos, o blanco o negro, o correcto o incorrecto, o estas conmigo o contra mí.
    Saludos!!

    • Tyler, la tendencia de dividir seguramente va a seguir ganado terreno hasta llegar a extremos aún más absurdos de los que hemos visto y eso da miedo. Lo más preocupante es que cuando él la película y la crítica son buenas son muy pocos los que lo elogian (no estaría de más un comentario como: tío, me convenciste creo que le daré una oportunidad a la peli) poco lo he visto ya que por experiencia sé que muchas buenas críticas no llegan a tener ni un comentario, yo lo hago como filosofía personal, se lo útil que es un elogio a tiempo motiva mucho.

      Ah, pero cuando dices que la obra es un truño llueven los comentarios y es bastante irónico. Otra cuestión es que al contrario de lo que se pueda creer internet nos da la ventaja de que podemos ser tolerantes y pensar mejor nuestros argumentos sin ser impulsivos. Ya que aunque no conozcamos a nuestros detractores si los tuviéramos en frente lo pensaríamos mejor a la hora de crear polémica. Es decir, este medio da la ventaja de justificar mejor nuestras respuesta y argumentos, incluso puede que al final nosotros mismos veamos que el otro tiene razón, pero aceptarlo nos cuesta, preferimos utilizarlo para soltar lo primero que nos viene a la mente.

      Tenemos que aprender a diferenciar entre ser políticamente incorrecto y ser idiota e imprudente ya que son cosas distintas.

      Un saludo, gracias por el comentario de ambos!

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