Todos queríamos a Baldur´s Gate. Incluso la gente que no jugaba a juegos de rol jugó en su día a Baldur´s Gate. Un juego destinado a fracasar, por intentar meter un sistema de combate tan poco intuitivo como el de la segunda edición de Dungeons & Dragons. Al final, como ya hemos comentado por aquí, terminó siendo un antes y un después en los videojuegos de rol, siendo su referente principal hasta la llegada muchos más años después de Skyrim.
Hay mucha trampa en la nostalgia, gran parte de la industria de “lo friki” vive de ella. Mirad si no de qué vienen los llamados “remakes” o precuelas en películas, cómics o videojuegos. Es muy fácil vender productos menores o regulares aprovechando el recuerdo bueno que nos dejó algo en el pasado. En resumen, si me pongo a ver los capítulos de Bola de Dragón en los que Goku pelea con Freezer puede que termine suicidándome ante la desesperación de ver tantos ratos en que no hacen nada más que mirarse sonriendo, cosa que con perspectiva es muy muy turbadora. También porque eran, todas juntas, más de cuatro horas.
Todo esto viene a que algunos de los más grandes creadores de videojuegos de rol occidental se han juntado para hacer un videojuego de rol con aroma a Baldur´s Gate. Es la gente de Obsidian. Gente como Chris Avellone (principal responsable del que suele decirse que fue el mejor juego de rol: Planescape Torment, pero también de Icewind Dale, Neverwinter Nights 2: Mask of Betrayer o Alpha Protocol), Tim Cain (el mismísimo creador de la saga Fallout, El Templo del Mal Elemental, Vampiro: la Mascarada) o Josh Sawyer (Fallout: New Vegas), etc. Han buscado financiación vía crowfunding en Kickstarted prometiendo que harían un Baldur´s Gate más bonito, con más de todo, fiel a los viejos principios de los juegos de rol, durillo, profundo y exigente, con chorrocientas horas de juego, traducido hasta en el idioma que habla tu perro, etc. Clasicismo y profundidad en un envoltorio nuevo. La venta de motos funcionó y recaudaron más de 4 millones de dólares. Estaba claro que habían vendido nostalgia pero también muchas novedades, aunque ninguna de ellas chocaba con lo clásico: perspectiva isométrica, relaciones entre los personajes, importancia de los diálogos, batallas exigentes, pausa táctica, etc. Pillars of Eternity estaba en marcha.
https://www.youtube.com/watch?v=7m4oWxsJLvo
Casi todo lo que han ido comentado del desarrollo del juego, de lo que iban metiendo, de cómo se ve de bonito, de las mecánicas de combate, de su complejidad, del sistema de reputación, todo iba sonando de maravilla. Como un viejo amigo que vuelves a ver y está mejor de lo que ya recordabas. Es peligroso jugar con los recuerdos de juventud de la gente por la inmensa decepción que puedes crear, pero ellos se han atrevido. Y lo han hecho vendiendo aún más complejidad de juego, no simplificandolo o sólo mejorando gráficos. Es decir, no se han limitado a copiar y pegar, se han decidido a mejorar lo que ya había, dando muchas más opciones al jugador, mezclando cosas buenas de varios de sus juegos y metiendo alguna cosa más.
El juego sale hoy, sólo para ordenadores. En castellano. Sin multijugador. No parece que pida mucha máquina. Está en www.gog.com, en Steam y en formato físico en las tiendas. En Steam es ahora mismo mientras escribo el juego que más se está vendiendo. Cuando lo juegue y me lo pase ya haré un post. Creo que me haré un monje al que llamaré Kenshiro e iré dando puñetazos mortales por ahí. O vuelvo a hacerme un paladín negro y calvo llamado Will, como la primera vez que me pasé Baldur´s Gate.
Estoy como un niño chico: entusiasmado pero con miedo a que nos decepcionen. Como os odio, Obsidian. Y cómo os quiero.