Bienvenidos un sábado más a la sección de los amantes del cómic. Bienvenidos a El cómic de la semana. ¿Qué sería de esta web si no se hablara de nuestro amigo John Byrne? Porque evidentemente señores con este tomo damos entrada a la etapa de nuestro ídolo de masas en la colección de los Vengadores costa Oeste, o como se los conocían en estos lares: Los nuevos Vengadores.
John Byrne
De John Byrne no vamos a hablar mucho más, porque ya hemos hablado de él en innumerables post. Que si era un autor excepcional con un ego aún más grande, que si se fue a DC por problemas creativos pero luego volvió a Marvel, que si revolucionó el medio, que si… Mirad, os dejo un enlace que hicimos en esta sacrosanta web (como diría Raúl, el de la tapa del obseso) que explica de modo personal y ligero quien es John Byrne:
Byrne tenía una cualidad que a veces podía ser un defecto y otras una virtud, no podía quedarse quieto. Es como un niño de esos que son hiperactivos y que al principio hacen gracia y luego preocupan. Pues Byrne, cuando llevaba un tiempo en una colección empezaba a preocupar porque o le dabas lo que quería o te la armaba. Generalmente no salió bien parado con sus editores y que lidiar con un Miura como este autor no parecía cosa fácil. Y es que, se me olvidaba mencionar, Byrne entraba en las series como un elefante en una cacharrería. Pero me gustaría decir que no hacía y deshacía todo a su antojo porque sí, siempre tenía un transfondo. Y es precisamente en esta colección, es precisamente en este tomo donde podemos ver al Byrne que todos queremos desatado. En Vengadores Costa Oeste nuestro autor favorito empieza, quizás de la manera más radical que lo hizo nunca en una serie, destrozando a un personaje principal y para siempre. Datos a tener en cuenta, no he dicho “para siempre”, sino para siempre. John hace que desmantelen a la Visión de tal manera que olvida toda su personalidad anterior y le convierten prácticamente en un nuevo ser, un nuevo androide (esa palabra no es la exacta) y oye, más o menos, con matices, eso se ha seguido cumpliendo y han pasado décadas.
Pero no acaba la cosa, porque en la segunda parte del tomo nos topamos con el preludio de lo que le va a pasar a su mujer, a la Bruja Escarlata. Y lo que le pasa a Wanda quizás sea más grave que a su marido. Todo lo acontecido en decenas de sagas posteriores donde “la hija de Magneto” (ahora dicen que no) se vuelve tarumba tiene mucho que ver con lo que Byrne le va a hacer a ella. La va a dar la vuelta a todo, incluyendo la cabeza y ese poso quedará para siempre. Y repito que no he dicho “para siempre”.
Si lo analizamos friamente, la entrada de Byrne en esta colección fue una auténtica sangría de personajes principales y no es una cosa aislada. Lo ha hecho en la mayoría de series incluyendo Hulk y eso que sólo estuvo 6 meses.
Por tanto recomendamos este cómic porque engloba la primera parte de Byrne en la colección, porque redefine a un personaje totalmente como la Visión y porque su dibujo, sobre todo la parte inicial es de un nivel muy alto. Bien es cierto que luego se deja llevar y el trazo pierde fuerza, pero es un dibujo de una calidad muy alta. Y también porque es Byrne, que narices.
Ahh y no me olvido del guión, que hay leerlo y disfrutarlo. Un cómic a caballo entre los 80 y 90 que merece estar en cualquier biblioteca.
Contiene The West Coast Avengers v2, 42-50 USA
¡John Byrne revoluciona los Wackos! El más carismático autor de superhéroes aterriza en la colección de Los Vengadores Costa Oeste para cambiarlo todo de arriba abajo, y los mayores afectados serán La Visión y La Bruja Escarlata. Los secretos del sintozoide salen a la luz, en la historia que cambió el destino de esta pareja para siempre y asentó las bases de “Vengadores desunidos”
Autores: John Byrne
