Existe algo de éxito en la nostalgia. Lo hemos visto en el cine, en la literatura y en la música, pero muchas veces no olvidamos de otra faceta en la que también se ha hecho mucha divulgación y donde muchos de los grandes artistas han empezado: los fanzines. Esto son publicaciones temáticas realizadas por y para aficionados, y en los últimos años se está recuperando este arte. Desde monmagan.com proponen un recorrido por la historia de estas publicaciones que puedes considerar una guia para adentrarte en este mundillo, y lo recomendamos.
Pensemos en cualquier campo cultural. Si te gusta la música, has de saber que en los años setenta, cuando empezaron a hacerse frecuentes y populares los fanzines, muchos grupos crecieron gracias al apoyo de jóvenes reporteros, o periodistas en la sombra, que motivados por el interés en su afición favorita se acercaron a grupos que pegaban fuerte en su ciudad. Les entrevistaban y luego con el tiempo, hablamos de entidades como Metallica, The Offpsring o U2, porque todos ellos salieron en estas publicaciones locales. Todos ganaban: unos por darse a conocer, y otros por hacer sus primeras publicaciones impresas en las que crear una marca, una cabecera en la que abrirse hueco. No sólo eso, el periodista aprendía a moverse, aprendía a hacer marketing, descubría como editar y maquetar. Los fanzines han sido la manera rápida de aprender para muchos. Y luego, en ocasiones se convirtieron en objetos de culto o coleccionismo.
Fanzine, de hecho, es un concepto de origen inglés, donde más se promocionó este tipo de publicaciones y donde funcionaron mejor. Sin ir más lejos la palabra viene de fan (aficionado) y magazine (revista), por lo que podemos decir que es una revista publicada por aficionados de determinado tema. Y, como decimos, estos temas puede ser cualquier campo cultura: música, cómic, cine, literatura, fútbol, fotografía, político o activista… aunque con el tiempo se han unido nuevas propuestas de ocio como pueden ser videojuegos o series. Y por su propia naturaleza se trata de publicaciones especializadas y por lo tanto pueden presumir de cierto nivel de profundización sobre la materia. Los que escriben, aunque generalmente no son profesionales, son aficionados de gran nivel, que perfectamente podrían desenvolverse en la primera línea de ese campo cultural y, por otra parte, sus lectores buscan ese trasfondo avanzado y por lo tanto los podemos considerar también como un público exigente. Digamos que aunque se trata de aficionados no es para introducirse en un campo del que no conoces, es para gente que ya se ha movido mucho dentro de ese ambiente.
Si quieres adentrarte en el mundo del fanzine, ahora, gracias a las redes sociales tienes muchas posibilidades así que no descartes bucear en la web en busca de esa pasión que tanto te gusta. Encontrarás publicaciones muy interesantes como la que aquí sugerimos y, lo más importante, a lo mejor acabas creando la tuya propia.