‘La droga es lo más democrático del mundo, los ama a todos por igual, pero los ama muertos’.
‘Fuerza. Notas desde un centro de rehabilitación’ es una novela gráfica, contada desde la experiencia del autor en un centro de rehabilitación de una ciudad cualquiera sobre las vivencias y pensamientos de quienes trabajan allí y de quienes necesitan su ayuda.
Por desgracia he vivido, en alguien muy cercano, una de las cuatro adicciones que se mencionan y puedo entender (en una pequeña parte) lo que sufren las personas que se ven inmersas en esa caída autodestructiva, así como también sus seres queridos.
Ferrán Vidal admite en el prólogo que un 10% de lo que narra en esta novela es mentira, ya que (como confesó posteriormente) él no trabajó en un CAS (Centro de Atención y Seguimiento a las Drogodependencias), sino que fue paciente. Y eso es algo que le honra y el mejor ejemplo de lo duro que es exteriorizar el problema de la adicción que se lleva la vida de 3 millones de personas al año en el mundo.
El autor cuenta todo lo que ocurre y ha vivido en uno de esos centros. Lo hace sin tapujos y sin el morbo añadido a este tipo de historias o la emotividad impostada que busca ‘tocarnos la patata’ para que sintamos lástima por sus protagonistas y demos gracias por nuestra vida. No es un videoclip o un concierto contra la droga en el que la mayoría son consumidores.
La frase con la que he comenzado el artículo es del prólogo y describe a la perfección lo que es el mundo de la droga, ya que abarca desde la persona rota que se refugia en estas sustancias para sobrellevar los golpes de la vida hasta el falso glamour que hay tras los famosos que las consumen. Sí, he dicho ‘falso’ porque nada bueno y glamuroso puede salir del alcohol, cocaína, heroína y demás drogas conocidas.
Este collage de personajes de todo tipo nos muestra y demuestra que la droga puede ‘amar’ a cualquiera y no solo a quienes viven en riesgo de exclusión social o barrios y entornos marginales.
‘Fuerza’ podría ser una de unas historias con final trágico y melodramático o de superación lacrimógena de las que tanto vemos en cine y televisión, pero no es así: Ferrán Vidal se trata de poner el traje de objetividad y nos cuenta las vivencias de quienes pasaron por el CAS tal y como fueron. Aunque estoy casi seguro que habrá situaciones que se hayan suavizado para hacer el relato algo menos crudo.
El viaje por los tipos de adicciones y los problemas que traen consigo es orgánico y bien organizado pese al aspecto desordenado y caótico de algunas de las páginas. Las declaraciones de quienes han perdido todo por culpa de la droga y quieren salir se mezclan con las de personas que aún se ven dominadas por esa amante celosa que no los quiere ver sacar la cabeza. Seres humanos aferrados a un pasado sin adicciones en el que eran mejores y más hermosos.
El apartado visual es el de un diario de guerra, de una guerra que deja secuelas y que se refleja en las miradas, en las arrugas y en los rostros demacrados con expresiones de hastío, cansancio y amargura.
Conclusión
‘El mono’ te obliga a cometer todo tipo de disparates y solo la fuerza de voluntad y otras más que conoceréis si leéis esta novela gráfica son la forma de salir de las adicciones.
De eso va ‘Fuerza’ de Ferran Vidal, de buscar justamente esa fuerza y pedir ayuda si no la tenemos, así como de personas que mienten, roban y tocan fondo, pero que ven, en ese pozo, el coraje para acudir a un Centro de Atención y Seguimiento a las Drogodependencias.
Solo puedo recomendar leer esta novela gráfica por su carga emocional sin caer en lo superficial, darnos a conocer las caras y nombres de quienes están sufriendo y recordarnos que cualquiera puede tener una mala racha y un abrazo es un buen comienzo.
Sé que por mis vivencias personales se me puede catalogar de no ser objetivo con esta historia, pero no me lo tengáis en cuenta; haceos con ‘Fuerza’ y veréis el mundo desde otro punto de vista.
Resumiendo: ‘Fuerza’ es un álbum de fotos descoloridas y rotas de las que muchos apartaríamos la mirada y que están ahí para recordarnos que todos cometemos errores y que necesitamos ayuda para entrar a esa fuerza para salir del pozo.
Aquí os dejo la web de Norma donde encontrar ‘Fuerza’ y su acertada portada:
Un saludo y sed felices.