No soy un apasionado de los videojuegos, más que nada por la falta de tiempo para jugarlos. He jugado a clásicos e intento echar una partida de tanto en tanto pero es un entretenimiento que tengo algo abandonado. Sin embargo esta vez debo hacer una excepción y es que he seguido a cuenta gotas el pasado E3 2018 (Electronic Entertainment Expo 2018) y hay una juego que me ha llamado poderosamente la atención, un juego que merece que le dediquemos algo de tiempo en esta web. Se trata de Sable, desarrollado por el estudio independiente Shedworks.
¿De qué va Sable?
Según la sinopsis proporcionada por el estudio:
Sable es una fábula al estilo coming-of-age (novela de aprendizaje) basada en el descubrimiento personal a través de la exploración de un fascinante mundo desierto. Sumérgete en un profundo viaje personal a través de un planeta alienígena en la piel de la joven Sable, explora milenarios monumentos, arquitectura en ruinas y naves caídas del cosmos mientras descubres la historia de sus habitantes y el lugar de Sable en el mundo.
Ya lo sentimos pero de momento no tenemos más información al respecto. Tampoco tenemos nada más concreto acerca de sus requisitos técnicos, aunque sabemos que saldrá para PC y MAC y que el sistema operativo mínimo será Windows 7 y 10.8 Mountain Lion, respectivamente. ¿Estará disponible para otras plataformas? De momento no lo sabemos. Tampoco tenemos claro como será la jugabilidad, más allá de que será una aventura de exploración con una protagonista femenina.
Entonces, ¿por qué Sable?
Si, es una pregunta legítima. ¿Por qué fijarnos en un juego del que tenemos tan pocos datos y que no sabemos siquiera su fecha exacta de lanzamiento, aunque este previsto para 2019? Pues sencillamente porque el vídeo de presentación es una auténtica maravilla gráfica, son unos escenarios que quitan el aliento y que recuerdan mucho a los dibujos y las historias de Moebius (Jean Giraud, 1938 – 2012). Son (somos) muchos los que estamos dispuestos a darle una oportunidad a este juego tan solo por la posibilidad de explorar a nuestro aire un paisaje que nos evoca historias como El Incal o El Garaje Hermético.
Sí, es un riesgo. Son muchos los títulos que prometen y prometen y, al final, se quedan cortos y nos decepcionan. También son muchos los juegos maravillosos gráficamente y que a la hora de jugarlos son puro aburrimiento o bien te los ventilas en una hora. Pero de momento seamos optimistas. Además, tenemos el vídeo para disfrutar y ponernos los dientes largos. Juzgad vosotros mismos. Un saludo y sed felices.