Rick y Morty sabe lo que queremos. Nos ha dado peleas interdimensionales, grandes villanos con planes que abarcan distintas temporadas, parodias descacharrantes de distintos subgéneros de la fantasía y la ciencia ficción y ahora, por fin, nos ha dado dinosaurios. Hay que reconocer que los dinosaurios mejoran todo lo que tocan, al igual que los zombis o los robots. Mejoran las películas, los cómics, los videojuegos y… ¿la sociedad globalizada? Comprobémoslo a continuación, junto a los desdichados protagonistas de esta serie, en Morque JuRícksico.
Rick y Morty contra los dinosaurios
El planeta Tierra, dentro del universo de Rick y Morty, ya ha recibido la llegada de distintos visitantes del espacio, pero ningunos como estos. No son alienígenas, sino los habitantes originales del globo, los dinosaurios. En lugar de extinguirse, la mayoría de estos seres abandonaron el planeta azul para visitar distintos mundos y traerles su sabiduría. Ofrecen a los líderes globales la posibilidad de tomar el relevo para convertir el mundo en un paraíso. Y, contra todo pronóstico, lo consiguen.
El paro sube al 100%, pero nadie pasa hambre. Se han acabado las guerras, se ha acabado la intolerancia y la contaminación. Se han acabado todos los males del mundo. ¿Todos? No. El aburrimiento campa a sus anchas, y eso no solo hará que Beth casi pierda la cabeza, sino que también motivará al presidente de Estados Unidos para llegar a un pacto con Rick para derrocar a estos seres. El científico loco intentará sacar los trapos sucios de estos gobernantes tan benevolentes, pero puede ser que no tengan ninguno.
La ociosidad, el trabajo y el aburrimiento
Discutí hace poco junto a unos compañeros de trabajo lo que haríamos de contar con millones de euros. Para mi sorpresa y horror, había gente que juraba que seguiría trabajando aún pudiendo renunciar a ello porque no sabría qué otra cosa hacer. De eso trata este episodio, en el que todo el planeta se encuentra con el tiempo libre para lidiar consigo mismos y en el que no todos reciben este cambio con alegría. Cuesta acostumbrarse a la ausencia de tareas, como podrá atestiguar quien haya pasado una temporada larga en paro, y el capítulo lo demuestra muy bien.
De nuevo, Jerry se beneficia de la invasión, como cuando la Federación Galáctica dominó la Tierra, pero esta vez demuestra su cambio de personalidad al enfrentarse a los dinosaurios cuando deciden publicar su novela de forma anónima. Esto refleja también una triste verdad sobre la naturaleza humana: por muy deseable que sea una utopía, siempre habrá alguien que prefiere su gloria personal al bien común. Por supuesto que tenía que ser Jerry quien lo hiciera. Y por supuesto que también tenía que ser Rick.
La travesía a través del espacio para hallar el secreto de los nuevos dueños del mundo es toda una delicia, con algunos chistes desternillantes y unos guiños maliciosos a la saga Parque Jurásico y al Universo Cinematográfico de Marvel, así como a las políticas religiosas de ciertos países. Ver a estos pobres dinosaurios tratando de poner orden en un planeta de desagradecidos malcriados como nosotros es tan gracioso como lamentable. Las últimas víctimas de Rick nos caen bien, pero ya imaginábamos cómo iban a acabar.
Entre gag político y gag político, agradecemos el retorno de Keith David como el presidente, uno de los secundarios más carismáticos de esta serie y que se está convirtiendo en casi un miembro del elenco principal, mucho más divertido que los profesores del colegio de Morty o sus compañeros. No podíamos abandonar esta reseña sin mencionar la hilarante escena poscréditos, que coge una broma al azar para terminar un episodio agridulce con una carcajada. Viva el humor absurdo.
Conclusión
Este capítulo destaca por someter a los personajes a una situación extrema, esta vez no por lo desagradable que resulta, sino por todo lo contrario. La mejor comedia se basa en lo inesperado, y lo más inesperado en Rick y Morty es que las cosas salgan bien. Por ello, explorar lo que hacen estos personajes en una utopía da lugar a unas situaciones que el guión ha aprovechado magistralmente.
La serie hará un parón para volver en noviembre. Estaremos allí para comentarla, ya que estamos quedando encantados con esta nueva tanda de episodios. Ojalá se mantenga la buena racha.
