El universo de los superhéroes está copando Hollywood y resulta muy, muy rentable. Sólo hay que echarle un vistazo a las previsiones de éste año, repletas de títulos que las principales editoriales y productoras nos tienen preparados. Los fans, por lo general, solo pedimos fidelidad a esos personajes que conocemos tan bien y, si es posible hacer una gran película de ello, mucho mejor.
Ahora, con ese torrente que nos llega, le toca el turno a Deadpool, más conocido en España como Masacre, el mercenario bocazas. Hace unos años resultaba difícil de imaginar que éste personaje creado por Liefeld y Nicieza en los años 90 llegara a nuestras pantallas antes que otros más conocidos, pero en ésta nueva sociedad donde leer cómics ya no es cosa de unos pocos, los más acérrimos tenemos la oportunidad de ver algunos de nuestros personajes favoritos, incluso aquellos considerados de “segunda línea”, protagonizando su propio film.
Deadpool es una película de superheroes diferente, eso está claro, aunque Fox, que se las ha apañado para forjar su propio universo cinematográfico a través de la franquicia mutante, haya incluído elementos de la misma. ¿Funciona? Maravillosamente. Desde el minuto uno, incluso desde los mismos créditos –cuando la veáis sabréis a qué me refiero- la película es un sin fin de escenas descabelladas y grotescamente hilarantes, encadenadas con habilidad para que no haya un sólo momento de tedio. Pero no nos engañemos: Esta película no es para todos los públicos y hay que saber a lo que venimos cuando se cruzan las puertas del cine.
Wade Wilson es un mercenario que está tratando de llevar una vida algo más honrada que la de asesino a sueldo. Parece que las cosas están cambiando definitivamente cuando conoce a Vanessa, una prostituta de la que se enamora y con la que pretende casarse, hasta que es diagnosticado un cancer terminal. Con la motivación de salvar su vida, Wilson decide someterse a un experimento que curará su enfermedad, otorgándole un asombroso factor curativo al igual que una mejora de sus habilidades, pero le dejará desfigurado de por vida. Ahora, transformado en Deadpool, el mercenario busca al hombre que cambió su vida para vengarse.
Con una sencilla trama se desarrollan casi dos horas de metraje de espectacular acción, puro humor negro y algunas escenas intercaladas de suave –y en ocasiones muy sexual- romanticismo. En realidad, la formula siempre es añadir el factor “humor negro” a cualquier situación que nos encontremos: chistes sexuales, de pollas, sangre por todas partes y algunos cameos de personajes conocidos conforman el alocado cóctel que resulta ésta entretenida película.
Además, los fans están de suerte. La trama, aunque con variaciones, es una de las historias clásicas del personaje, con elementos y lugares que cualquiera podrá reconocer y personajes perfectamente logrados como Comadreja o la Ciega Al. Lo que es el propio Deadpool, se acerca más al personaje de la etapa de Joe Kelly, con referencias constantes a la cultura pop, la clásica ruptura de la cuarta pared, autoparodias -muy agradecidas- al propio Reynolds e incluso al personaje de Deadpool de Wolverine: Origins y un balance bastante equillibrado entre el personaje torturado por su vida que, a la vez, es un oscuro y desenfadado humorista.
¿Estás buscando un film con profundidad? Esta no es tu película. ¿Buscas un film de humor inteligente? Pues lo es, aunque por partes y recuerda que la referencia sexual y gore es una constante, asi que si no te va ese rollo, esta no es tu película. ¿Buscas un film al que llevar a tu hijo pequeño? Esta no es su película, aunque seguramente le encantará tanto como a tí si llega a verla.
Deadpool es, en resumen, una oscura y entretenida película humorística, con grandes escenas de acción y una vuelta diferente a la tuerca de las películas de superheroes. No va a crear un nuevo género pero sí aportará una merecida frescura al mismo. Por cierto, imprescindible la escena al final de los créditos.
Guauuuuuuuuuuuu que fuerte. Ya tenéis la crítica. Me alegro por la web que sigo desde hace meses. Tengo muchas ganas de verla. Gracias chicos, no faltaré al cine.
Muchas gracias Humberto, estamos al día gracias a Manuel que es un crack. Gracias por seguirnos
Estrenada hoy en Colombia y si era lo que esperábamos de Deadpool, simplemente genial!!!!
Si muy buena película, vale la pena verlo, aunque no aparece wolverine :v….pero si las escenas gore pagan cada centavo y se acercan a lo más real posible.
Es un asco.
Ahora mismo la he visto. Entra directamente en mi top3 de Marvel. Así, sin más.
1. Guardianes de la Galaxia
2. Deadpool
3. AntMan
¿Los Vengadores? Si, la primera vez impacta y mucho (que conste que me gusta), la segunda vez que la vez piensas “pero, ¿que coño es esto?”. si un jodido coñazo. Estas tres no aburren en ningun punto, son divertidas (humor muy distinto el de cada una, eso si) y extremadamente entretenidas que gusta de igual manera. Quiero más Deadpool, más Guardianes y Antman.
Alguien puede decir ulguna otra que sea entretenida de principio a fin. No lo creo. En Deadpool te ries hasta con los créditos iniciales y finales.
Ismael estoy contigo! Me lo pasé genial en esta peli, y eso que normalmente no me río cuando lo hacen los demás, y los chistes fáciles tampoco me van.
Pero esta desenfadada forma de ver el mundo de un super (dejémolslo ahí) es divertida a pesar de todas las putadas que le pasan.
Que no perdamos nunca el sentido de humor!
Al menos es diferente
Si tuviera que calificarla de alguna forma, esta sería refrescante. No es un peliculón, pero da lo que pide la gente. Una película de superhéroes sin pretensiones,con humor grueso y repleto de bromas hacia el género.
Deadpool es innovadora al romper la cuarta pared. Es diferente. Y no estoy de acuerdo en que casi ninguna merece la pena.
Se me ocurren grandes películas contemporáneas de superheroes:
Batman Begins
Batman el caballero oscuro
El caballero oscuro. La leyenda renace
X-Men Primera generación
Capitán América Soldado de Invierno
Guardianes de la galaxia
Vengadores
Y ojo, solo estoy diciendo las excelentes. Luego hay muchas de muy buena calidad