El cómic de la semana: Transformers: Robots in Disguise 4. Segundo reinicio

Bienvenidos un sábado más a la sección de los amantes del cómic. Bienvenidos a El cómic de la semana. Este sábado toca Transformers: Robots in Disguise 4. Segundo reinicio

Allí donde More Than Meets The Eye es una aventura de acción y comedia, con profundidad, Robots in Disguise se revela como un auténtico Thriller político, con la misma profundidad.

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Lo sigo diciendo: los cómics de Transformers están mejor que nunca. Tienen tramas densas y complejas, personajes interesantes con planes intrigantes, y pasan tantísimas cosas que sólo quieres leer y releer cada capítulo para asegurarte que no te has perdido nada. Larga vida a esta etapa porque, de nuevo, no son sólo buenos cómics de Transformers . Son buenos cómics. Y punto.

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Introducción

   El pasado mes de Septiembre, Planeta Comics ha publicado el cuarto tomo de la serie Transformers: Robots in Disguise. Dicho tomo contiene el material USA The Transformers: Robots in Disguise #28-38 y lo llamamos segundo reinicio porque supone un nuevo punto de partida después de lo sucedido en el evento Transformers: Cybertron Oscuro.

Breve presentación de lo anterior

   Soy consciente de que puede que haya algún lector que no haya leído nada de la etapa de Transformers de IDW y se haya acercado a este post por curiosidad. Así, aunque no me gusta meter demasiado contenido de materiales diferentes a los recogidos en este tomo, para no alargar este post en exceso, he decidido hacer una breve introducción de lo acontecido hasta ahora, para que os hagáis una idea.

   Nos remontamos al 2005, año en el que la editorial americana Idea and Design Works LLC, IDW Publishing, se hizo con los derechos de la famosa franquicia de Hasbro Transformers. Desde el principio se hizo patente que su intención era revitalizar los primeros Transformers, -los Transformers de primera generación, popularmente llamados G1-, al proponerle al escritor británico Simon Furman un relanzamiento de la continuidad del G1.

   Furman fue el último guionista del cómic de Marvel sobre Transformers G1. Pero las bajas ventas canceló la colección cuando Furman la estaba haciendo interesante. IDW fue consciente de eso y le dió la oportunidad de cerrar sus tramas pendientes así como participar en la renovación de la franquicia con una marcada influencia de la línea Ultimate de Marvel. A saber, argumentos más sofisticados y desarrollados, con tramas que resulten creíbles desde el punto de vista de una raza de robots transformables en guerra, favoreciendo situaciones en las que prima la astucia así como la capacidad de estrategia y planificación, más allá del clásico conflicto de buenos contra malos a la vista de todos.

   La proyección de las películas de acción de Michael Bay hizo que IDW dejara este interesante enfoque de batallas encubiertas a favor de nuevos productos más cercanos al estilo cinematográfico. Pero no terminaron de cuajar. Motivo por la que la editorial fue valiente y dió un giro radical, en 2012, plasmado en dos colecciones, The Transformers: More than Meets the Eye y la colección que nos ocupa, The Transformers: Robots in Disguise. La primera es considerada por la crítica como uno de los mejores cómics del mercado americano, recibiendo tres nominaciones a los premios True Believers y dos premios de la web Comics Alliance.

Otra guerra transformers en La Tierra

   More than Meets the Eye de James Roberts, que narra las aventuras de Rodimus Prime y su tripulación de La Luz Perdida en busca de los legendarios Caballeros de Cybertron, es la más atípica de las dos cabeceras por su peculiar mezcla de humor inteligente, acción y brillantes momentos de caracterización de los personajes, en su viaje por el cosmos. Pero esta serie merece un post aparte. Nos centramos en la de este tomo, Robots in Disguise, guionizada por John Barber y dibujada por Andrew Griffith, Sarath Stone, Livid Ramondelli y Brendan Cahill. Si alguien piensa que la presencia de varios dibujantes merma la calidad del producto, le reto a comprobar que se equivoca. Cada uno de ellos encaja en el tono que Barber le da a las diferentes situaciones presentes en Robots in Disguise.

   El enfoque de Barber es más cercano al de Furman, combinando intrigas palaciegas con conflictos entre los Transformers y continuas vueltas al pasado, flashbacks, que enriquecen la historia de nuestros robots favoritos y sirven de telón de fondo para justificar los acontecimientos que han de venir, como la Guerra de los Combinadores.

   Conflictos entre los Transformers que nos son los clásicos Autobots contra Decepticons sino más bien los tira y afloja en los intentos por lograr que los Cybertronianos vuelvan a actuar como una raza en paz. A este respecto Starscream supo maniobrar habilmente, en arcos argumentales anteriores a este tomo, para convertirse en el gobernante de Cybertron y abrazar la idea de un Cybertron unido. Aunque siendo Starscream nunca hay que descartar una doble agenda.

   En este tomo vemos que, aunque Starscream se queda como gobernante de Cybertron, es Optimus Prime quien asume el liderazgo de la raza Cybertroniana. Mientras que Galvatron se convierte en el nuevo líder de los Decepticons que no aceptan este nuevo orden, después de que Megatron, tras la muerte de Bumblebee en la saga anterior, renunciara al liderazgo y a la ideología decepticons. ¡Pero si esto parece lo mismo de siempre! ¡Arriesgaros a probarlo y me decís!

   Lo que cambia es el escenario de batalla, que vuelve a ser La Tierra, donde, tanto Galvatron como Optimus buscan al desaparecido Alpha Trion. A través de este último recordaremos el papel de Galvatron en la Primera Guerra Civil Cybertroniana contra los Headmasters, donde se muestra el carácter salvaje y algo fanático de Galvatron, que considera impuro todo Transformers adaptado para combinarse con otro.

   Pero no sólo brillarán Galvatron, Alpha Trion y Optimus en esta saga sino que también hay espacio para el desarrollo de personajes como Arcee, Kup, Jetfire, Jazz, Sideswipe, Sky Lynx y Cosmos. Así como para los Constructicons, ahora liderados por Prowl, cuya forma de actuar le acerca mucho a los antiguos Decepticons y le enfrenta con Optimus. Prowl es un estratega, frío y calculador, que no duda en usar a quien sea, a modo de peones, para justificar sus acciones, si estas llevan al cumplimiento de la misión. Optimus, por el contrario, continúa siendo el noble comandante, que aboga por el juego limpio en todo momento.

   La visita a La Tierra va a ser muy problemática. Los humanos recuerdan demasiado bien a los Transformers y ahora están preparados, con tecnología Cybertroniana, para hacerles frente. No quieren cuentas con ninguno de los dos bandos, si bien hay un Decepticon, Thundercracker, que ha decidido quedarse en La Tierra y vivir en paz. Hasta el punto de que su actuación será decisiva para poner fin al primer careo entre ambas facciones.

   Aunque hay que decir que, antes del regreso de los Autobots al planeta azul, El Comando de Defensa de La Tierra, aceptará una incomoda alianza con los Decepticons, cuando el Decepticon Soundwave les convence de que han abandonado sus ansias de conquista a favor de la forma de pensar Decepcion en sus orígenes: Una vida en libertad, lejos de las reglas marcadas por Cybertron.

El final de una saga transformers y el comienzo de otra

   Los Autobots consigue rescatar a Alpha Trion de los terrestres y, por él, saben que estaba en La Tierra buscando el Enigma de Combinación un artefacto de Nexus Prime por el que se pueden crear Transformers Combinadores.

   Será la posesión de este objeto -en manos del director ejecutivo de Onyx Corporation, Garrison Blackrock– el que enfrentará a Autobots, Decepticons y Humanos. Al final, un espía de Starscream, Scoop, consigue hacerse con él y se lo lleva a Cybertron. Lo que obligará a Optimus a volver a su planeta natal, anunciando lo que será el próximo evento Transformers, Combiner Wars.

Conclusión de Transformers: Robots in Disguise 4

Si me pusiera a profundizar en todos y cada uno de las tramas, subtramas y personajes implicados en esta colección no acabaría. Solo deciros que espero que lo escrito os haya despertado la curiosidad sobre los Transformers de IDW y os anime a probarlos. Aunque la frase, es un buen momento para engancharte a Transformers, es muy tópica, es del todo cierta en esta ocasión. Bien sabemos los lectores de cómics que las buenas etapas de nuestros personajes favoritos ni abundan ni suelen durar mucho.