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‘Good Omens’ Temporada 1 | El Apocalipsis nunca fue tan divertido

La segunda temporada de ‘Good Omens’ está a punto de estrenarse en Amazon Prime Vídeo y es por ello que he querido realizar un maratón con la primera. Es cierto que era una asignatura pendiente, sobre todo teniendo en cuenta las buenas críticas por parte de conocidos.  Teniendo en cuenta que se basa en una novela homónima de Neil Gaiman y Terry Pratchett, que son dos nombres con mayúsculas dentro de la fantasía, pues mucho he tardado en darle al ‘play’.

Aquí os dejo la crítica que realizó en su día mi compañero Pedro.

‘Good Omens’ es de esas obras, como ‘La Vida de Brian’ o ‘Dogma’ que usan el folclore de la religión católica para contar una historia repleta de enredos y diversión…. Aunque más políticamente correcta que las dos mencionadas.

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Toda la trama de esta primera temporada gira en torno a al nacimiento del anticristo y la llegada del apocalipsis y como Crowley (David Tennant) se equivoca de niño al dar el cambiazo y luego debe detener el fin de los días ya que está muy feliz viviendo entre los humanos. Si a esto le sumas su amistad/colaboración con un ángel llamado Aziraphale (Michael Sheen) pues tienes un coctel de enredos y situaciones algo bizarras (en el término anglosajón de la palabra).

La trama de la serie se basa en un collage de personajes variopintos que se van a ver involucrados en este Armagedón, que van desde ángeles a demonios, pasando por brujas y profetas, sin olvidar al anticristo, claro. Todo un batiburrillo de acontecimientos cósmicos y situaciones hilarantes.

El guion siempre avanza de manera lineal, excepto en un capítulo en el que se nos narra la amistad de Crowley y Aziraphale desde el jardín del Edén y de la entrega de esa espada que tantas veces se va a referir la historia.

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Desde el comienzo, el hilo conductor de la historia se mantiene firme y se va entrelazando con buen hacer con subtramas y personajes secundarios, lo que crea una sensación de universo real. Lo bueno de ‘Good Omens’ es que combina elementos de distintos géneros, como la fantasía, el misterio y la sátira, para ofrecer un estilo propio que navegue entre lo santurrón  y lo más irreverente.

La comedia es el pilar esencial de la serie y lo hace de una forma que no va a escandalizar a nadie (algo que he echado de menos). Hay muchos diálogos ingeniosos, situaciones y gags muy bien conseguidos con cierta ironía y parodia para abordar temas profundos de la existencia y la moralidad.  Un acercamiento que la hace destacar, pero que se me ha antojado floja ya que siento predilección por las cintas que cruzan la barrera de lo políticamente correcto y ese ha sido el punto que le ha faltado a ‘Good Omens’ .

La creatividad y la atención al detalle son más que evidentes en la realización de la serie. La producción es soberbia, desde los efectos visuales y la dirección artística hasta la música y la edición. Los mundos celestial e infernal, pese a tener aspecto mundano, están diseñados con un estilo imaginativo que les da ese aura distintiva.

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Por muy buen guion y efectos especiales que tuviese la serie, si la química entre sus protagonistas fuese nula, esto sería un producto fallido.  Por suerte la mayor fortaleza de ‘Good Omens’ es su magnífico elenco y lo creíble que es la relación entre David Tennant y Michael Sheen, el demonio Crowley y el ángel Aziraphale, respectivamente, con un carisma sorprendente. Sus actuaciones son simplemente excepcionales, se nota que se sienten muy cómodos con sus respectivos papeles.

La exploración de esa relación entre Crowley y Aziraphale es uno de los aspectos más destacados de la temporada. Una amistad improbable, forjada a lo largo de los siglos, es un recordatorio  de que ambos estuvieron en el mismo bando una vez. Son realmente entrañables.

Conclusión

‘Good Omens’ es una serie muy divertida que hace que una situación tan catastrófica como el apocalipsis sea una comedia de enredo y situaciones hilarantes. Esta serie sabe navegar muy bien en aguas peligrosas y salir sin ofender a nadie. No sé si eso es algo positivo o negativo, la verdad. Un poquito más de Monty Python y esto sería redondo.

Lo bueno es que la serie no pretende dar lecciones de moral, ni situarse en un bando para criminalizar al opuesto. Sabe ser bastante neutral a la par de paródica e irónica.

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La primera temporada de ‘Good Omens’ no solo es una adaptación fiel y respetuosa de la novela, sino que también es una obra muy interesante por sí misma. Es una gran combinación de actuaciones cautivadoras, unos personajes atractivos, una narrativa ingeniosa y una producción visual impresionante.

En unos días se estrena la segunda temporada, ojalá mantenga el tipo y continúe con la sátira repleta de humor y personajes potentes.

Aquí os dejo el tráiler de la segunda temporada de ‘Good Omens’:

Un saludo y sed felices.

Juanma Martín
Juanma Martín
Amante de DC desde que ví Batman de Tim Burton en la gran pantalla. Crecí con los vídeos Beta y VHS y visitando casi a diario unos lugares extintos llamados videoclubs. Seguidor acérrimo de las tardes de sofá y series, del cine y del "buen" cine más aun. Jugador de rol desde los 14 años y jugador de videojuegos desde los 20. Muy cliché durante gran parte de mi vida.
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