Parece que estoy ante el fin del mundo y no todo es blanco o negro. La vida real, fuera de Internet y más en concreto las RRSS, nos han enseñado que no todo es blanco o negro. Pero realmente me hago la pregunta: ¿Ha muerto el cine? Y no porque haya muerto ahora mismo, sino porque posiblemente esté muriendo y ahora nos estamos dando cuenta. Y además lo digo con intención porque posiblemente, tal y como esta concebido a día de hoy, no tenga solución, ¿o sí?
Y lo que escribo son datos, no opiniones. Y antes de seguir, me gustaría aclarar que este artículo está publicado el 29 de mayo de 2024, para aclarar posibles y futuribles malentendidos.
La recaudación en España, por poner ejemplos patrios, ha bajado un 25,5% respecto al año pasado, con un último fin de semana con mínimos históricos, el peor dato en 20 años sin contar la pandemia, claro está. Y esto sigue en declive y en retroceso. Y digo esto porque si lo comparamos con el 2014, hace 10 años, la bajada es del 45%, y si nos vamos a 2005, la caída es del 55%. Quizás es pronto para decirlo, pero la mitad de los espectadores que iban al cine hace 20 años ya no van. Vamos en caída libre y creo que esto no es bueno para nadie.
¿El precio del cine es muy caro? Posiblemente, pero la gente se gasta cantidades ingentes para ver un partido o un concierto de su artista favorito, sin contar festivales o terrazas en los bares. ¿Puede ser que hayan cambiado las prioridades? ¿Puede ser que hayan cambiado las formas de entretenimiento?
Las plataformas nos han cambiado y por ende han cambiado las formas de consumir ocio. Antes ibas al cine o no veías las películas en años. Y eso de ver series… las series eran consumo barato de televisión con actores fracasados que en el cine no tenían nada que hacer. Ahora todo es diferente. Ahora los televisores ya no son la pantalla pequeña como tal; son gigantes con una definición increíble. Además, parece que las series están desplazando al cine de su hegemonía audiovisual, por tener más recorrido y unos presupuestos estratosféricos. Y las series te las ves en tu casa, no en el cine.
Por tanto, la experiencia de ir al cine ya no parece que sea un evento por el que pagar cuando en casa lo tienes todo y con un mando con el que puedes parar lo que estés viendo si tienes que ir al baño. Que sí, que el cine no es barato y más cuando vas con la familia, y además tienes que sumar las palomitas y refrescos. Pero como dije antes, hay ocios más caros que seguimos consumiendo pero que no podemos disfrutar de la misma manera en casa.
¿El cine ha muerto? Quizás no, pero se está muriendo. En otros países la caída en taquilla no es tan grande, pero también existe un descenso. No se si hay solución o parches. Supongo que la tarifa plana al mes que hacen algunas cadenas valdrá para mitigar pérdidas, como las butacas gigantes, las pantallas gigantes… pero aun con todo, la sangría no se cierra.
¿Vosotros qué pensáis del declive del cine? Yo estoy preocupado por un Arte, con mayúsculas, que parece que está muriendo, al menos como lo hemos conocido hasta ahora. Habrá que ir proponiendo otras formas de ir al cine, porque como espectáculo, como evento o experiencia, como escribí antes, se está quedando atrás por la comodidad de ver las películas en casa.
Un saludo y sed felices.