Es difícil hacer algo bueno y diferente en contextos que se han utilizado en exceso, como es el Tercer Reich o la Segunda Guerra Mundial, de lo que se ha abusado en la ficción. No obstante, siempre se pueden encontrar nuevas aportaciones frescas, y Miguel de Lys lo ha logrado con su primera novela ‘La calle de las mentiras’, que mezcla en sus páginas un estilo que podría ser una mezcla entre Terry Pratchet y Tarantino.
A estas alturas las historias de la Segunda Guerra Mundial son tan comunes que el conflicto ha dejado de interesar a muchos, pero pocos son los que se han atrevido a afrontarla desde una perspectiva cómica (sin olvidar el rigor histórico -algo que se le echó en cara al final de Malditos Bastardos de Tarantino-). Lo vimos en películas como Doce del Patíbulo o la absurda pero divertidísima Top Secret, pero aquí nos encontramos con un toque más sutil, inteligente, que nos arrastra a una calle de una ciudad alemana donde todo el mundo tiene un secreto. Da igual la naturaleza de ese secreto, el resultado final es que de descubrirse, dadas las lógicas del momento, caería una condena a muerte seguro. Pero si todos ocultan algo, necesitan demostrar a todo el mundo su fervor por el Tercer Reich, aunque eso ponga el foco sobre ellos como adalides del nacionalsocialismo, aunque sea todo lo contrario. Y así todos en una calle. Lógicamente una mentira lleva a otra, la bola va creciendo y llega un momento que hay tantos engaños debajo de la alfombra que todo tiene que salir por algún lado. En definitiva, desde el principio estamos en una espiral de mentiras protagonizada por todos los vecinos que vamos conociendo poco a poco y encariñándonos de ellos, cada uno con una personalidad más cómica que la anterior. De hecho, la propia promoción del autor se aleja de lo encorsetado de la novela histórica y ha llenado su Twitter de memes, por lo que se podría decir que ha entendido la lógica de la divulgación actual, por lo menos si quieres llegar a las nuevas generaciones.
Y es que Miguel de Lys, aunque lleva tiempo escribiendo (en este web y otras) ha destacado por dos conceptos: divulgación histórica y humor, y eso ha sabido trasladarlo a La calle de las mentiras. Hay que admitir que juega en dos ligas complicadas. La primera es la de los divulgadores en YouTube, pese a tener un canal con más de 65.000 seguidores interesados en la historia, es cierto los libros publicados por muchos youtubers no merecen respeto ni considerarse nada digno de calidad, pero lo cierto es que eso está cambiando. Hay muchos escritores (como Javier Miró, que también reseñamos aquí con su Armadura de la Luz -y que se ha encargado de la corrección de la calle de las mentiras) que usan esta plataforma para publicar sus conocimientos y lo que vayan aprendiendo. Pero ahora muchos identifican YouTube con retos absurdos y claro, cuesta verlos como autores profesionales -aunque tampoco tendría por qué ser incompatible-. Sin ir más lejos en Las cosas que nos hacen felices, también tenemos nuestro canal de divulgación en YouTube. En cualquier caso, eso quizás juegue en contra del autor, y es una pena porque se nota que hay años de trabajo detrás y sobre todo porque será raro el lector que no aprenda algo nuevo del conflicto, cosa que se agradece ya que esta novela dista mucho de lo que en el cine sería una película bélica que te saque alguna sonrisa. Por otra parte, la otra liga complicada en la que juega es la de la auto publicación en Amazon, que es el camino habitual para los autores nóveles, pero que da lugar a que cualquiera pueda publicar, sin el filtro de una editorial o un crítico. Pero no olvidemos que David B Gil, el autor más valorado en Amazon en ficción histórica empezó así, y luego las editoriales le pescaron, convirtiéndose ahora en una firma de renombre (y que también hemos reseñado aquí).
Pero estamos convencidos de que Miguel de Lys sabrá sortear estas dificultades, pues ha firmado un primer saque honesto, divertido, entretenido y con mucho respeto por la historia. Si sigue escribiendo seguro que es capaz aprender de todo el proceso al que se ha enfrentado por primera vez y nos lleva a nuevas páginas en las que defina su estilo. En definitiva, si lees La calle de las mentiras, te vas a reír y vas a estar entretenido, así que si no sabes qué novela necesitas para este verano aquí te dejamos una idea.
Podéis comprar la novela aquí.
Un saludo y sed felices.