Si eres de los que les gustan los dramas familiares con una pizca de misterio, estás de suerte, ya que el día 8 de enero se estrenó en Netflix la serie La colina de los perros. Se trata de una producción polaca de cinco episodios que nos lleva a conocer a un famoso escritor en su regreso al lugar donde nació y pasó su juventud. Una juventud marcada por un trágico suceso que siempre le ha perseguido: un asesinato.
Mateusz Kosciukiewicz da vida a Mikolaj, un escritor novel que ha conseguido la fama con su novela biográfica donde cuenta sus primeros años de vida en su pueblo natal, Zybork. En él, retrata a personas reales con las que ahora deberá enfrentarse, entre ellos su padre, Tomasz (Robert Wieckiewicz), con quien mantiene una relación tensa.
El escritor regresa acompañado de su esposa Justyna, una periodista famosa por sus artículos de investigación donde revela temas espinosos. Ambos están pasando por una buen momento en su relación después de que Mikolaj haya superado sus adicciones. De hecho, este viaje se presupone como un intento de cambiar todo aquello que está mal en la vida del hombre. Pero acabará convirtiéndose en algo que no esperaba.
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La colina de los perros. La lucha de un hombre, con algo más.
En el primer episodio de La colina de los perros nos queda claro que la relación entre Tomasz y Mikolaj no va a cambiar por ese viaje exprés. Así que el escritor decide regresar a Varsovia con tan mala suerte que se encontrara en su camino de regreso con el cuerpo maltrecho de un antiguo conocido suyo de la juventud que había desaparecido hacía un tiempo.
Será así como empiece este drama familiar donde descubrimos que el personaje de Tomasz es mucho más de lo que aparenta a primera vista. Detrás de ese aspecto rudo y arisco se oculta un hombre comprometido con su comunidad, un defensor de los derechos de los más desfavorecidos que ahora mismo tiene una lucha con ‘los peces gordos’ de su ciudad.
Es lucha será una de las tramas que componen La colina de los perros, y nos dejará momentos intensos con una historia de compromiso social que dice mucho de sus defensores. Será una parte importante que acercará a padre e hijo, pero sobre todo, será el punto de apoyo sobre el que girarán el resto de tramas.
Un asesinato desgarrador.
Como ya he dicho, La colina de los perros tiene varias tramas. En el punto anterior hemos hablado de la lucha social y ahora toca hablar de la otra trama importante: el asesinato. Aunque, hablaré poco sobre ella, ya que no quiero caer en spoilers. Esta parte es mejor ir descubriéndola conforme la serie avanza.
Este trágico suceso es algo que siempre ha perseguido a Mikolaj provocándole sus peores pesadillas. Esta vez, todo se confabulará para que tenga el valor suficiente como para enfrentarse a él. Y aprovechando una serie de circunstancias, volverá a revivir aquellos días confusos de adolescente mientras se deja caer de nuevo en una espiral de dolor y angustia.
La colina de los perros tiene algo de oscuridad en su forma narrativa. La imagen que abre cada episodios nos crea cierto desasosiego mientras la voz en off nos habla de historias tenebrosas que acaban mal. Todo dirigido a confundir al espectador con una de sus tramas, aunque nos haya avisado de su final.
En resumen, si te gustan las historias dramáticas que rozan la tragedia, donde David lucha contra Goliath; con asesinatos del pasado que regresan al presente para atormentar a los más débiles, dale una oportunidad a esta serie polaca de Netflix.
