Hace ya unos meses tuve la oportunidad de compartir con vosotros mis impresiones sobre el tercer tomo de la laureada etapa de Garth Ennis (Predicador) a cargo de uno de los personajes más oscuros del mundo marvelita: Frank Castle, más conocido como The Punisher, el Castigador en España. Podéis ver la reseña de Cocina irlandesa aquí.
En esta ocasión toca hablar del sexto tomo, llamado Los esclavistas. Al igual que Cocina Irlandesa, un arco argumental cerrado en el que Ennis aprovecha nuevamente para retratar a lo peor de la sociedad occidental. Frank Castle es su cruzado, un hombre que camina siempre en la delgada línea entre el bien y el mal y que, de la mano de Ennis, se convierte en un instrumento implacable contra los que cometen las mayores perversiones de nuestro mundo. Tan implacable que, muchas veces, el lector repudiará muchos de sus actos, incomprensibles si fueran de la mano del Capitán América, Spiderman o el más callejero Daredevil.
Los esclavistas no es un cómic agradable. Es duro, muy duro. Por lo que se muestra, por lo que se sugiere y por lo que no cuenta. Esta vez, Ennis centra su mirada en la trata de blancas. Como mujeres, sobre todo de Europa del Este, se ven obligadas a usar sus cuerpos como una mera herramienta a merced de mafias que las venden como si fueran carne de cerdo. Como los organismos internacionales tienen unas leyes tan laxas al respecto que la mera detención de una de ellas implica deportarla a su país de origen, donde la misma mafia que la llevo a Estados Unidos la estará esperando con los brazos abiertos. Un círculo vicioso que causalmente salpica a Frank Castle durante una misión rutinaria.
Si el Castigador de Ennis desconcierta por su salvajismo con los criminales, su actitud contra los mandamases albanos de la banda es, si cabe, aún más extremista. Sabiendo que se trata de gente curtida en la Guerra de los Balcanes, decide que no solo puede matarlos sin más. Para disuadir a los que están por venir, debe cometer las mayores atrocidades que se han visto en un cómic de El Castigador. Creedme que, en más de una, costará verlo con buenos ojos, aunque sepamos qué es lo que han hecho los villanos.
La trama de Los esclavistas no se caracteriza por ser enrevesada. Básicamente, es la caza emprendida por el Castigador contra una familia que regenta un negocio de trata de blancas. No hay apenas relleno, y la única trama secundaria acaba enlazando directamente con la principal. Es curiosa la actitud que toma la policía con Frank Castle. Dado que no daña a los agentes de la ley, hacen oídos sordos a las actividades del justiciero que, sin duda, rebajan los niveles de criminalidad. Sin embargo, a tenor de lo que vemos en tomos como este… ¿Está realmente justificado que no hagan nada?
Al igual que en Cocina Irlandesa, nuevamente Ennis se ve acompañado del gran dibujante Leandro Fernández, que casa perfectamente con el estilo del guionista irlandés.
En definitiva, Los esclavistas pasa por ser uno de los tomos más duros que podemos leer de la larga etapa de Garth Ennis con The punisher. Un arco argumental que nos desvela el mal de la trata de blancas, uno de los negocios más crueles y desapercibidos del mundo. Lo que no quiere decir que sea un cómic impresionante, impactante y que nos hace crear conciencia sobre la podredumbre en la que camina nuestro mundo. Mención especial para su impresionante viñeta final. No desvelaré nada. Simplemente que la gran mayoría, aunque salgan de esa espiral de maltrato, jamás lo superan.
Panini ha editado Los esclavistas como el 6 tomo de la Marvel Saga dedicado a El castigador. Aquí tenéis más detalles sobre un tomo cuyo interés es indudable…para mayores de 18 años.
Contiene MAX: Punisher 25-30 USA
Con “Los esclavistas”. En una lluviosa noche, Frank Castle acaba brutalmente con una banda de criminales albanos que amenazaban a una joven mujer. Su nombre es Viorica, es de Moldavia, y cuando narre a Frank su historia, será cuando la sangre empiece realmente a correr. ¿Podrá un único hombre desarticular la terrible red de corrupción importada desde los Balcanes?
Autores: Garth Ennis y Leandro Fernández