Bienvenidos un miércoles más al análisis de esta etapa tan especial de nuestro personaje favorito del cómic, a cargo del guionista escocés Grant Morrison, tan alabado como odiado por la crítica de expertos y no tan expertos (grupo en el que yo me encuentro). Con esta reseña terminamos el arco argumental que ocupó la cabecera de Batman y Robin.
Por el momento Bruce Wayne sigue desaparecido pero las pruebas que encontraron Dick, Damian y Alfred en la Mansión Wayne, en los anteriores números, indican que su regreso está próximo. Pero empecemos desde el principio, la actual encarnación del dúo dinámico (y en ciertos momentos extraña pareja) se enfrentan a un resurgido Profesor Pyg, a la verdadera identidad de Oberon Sexton (una agradable sorpresa) y, lo que es peor, la inminente reaparición del Dr. Simon Hurt. Es cierto que la lectura de este tomo sin conocer la historia narrada en El regreso de Bruce Wayne (tomo que reseñaré la semana próxima) puede parecer un poco inconexa, incluso incoherente. Por este motivo os doy el consejo de que hagáis una lectura conjunta de ambos volúmenes, que de manera acertada fueron publicados de manera simultanea por DC Cómics en un principio. De este modo haréis una lectura más enriquecedora, comprensible y que definitivamente os sabrá como conjunto de una manera bestial.
Para acabar con su trabajo en Batman y Robin, Morrison nos la vuelve a liar. ¿A qué me refiero? Pues bien, estamos ante un final en el que hay muchas referencias a los números anteriores y será una lectura que no entenderemos si no estamos muy concentrados y poniendo todos nuestros sentidos en ella. Todos los villanos tienen su particular plan y, todo cambia, más si cabe, con la verdadera personalidad de Oberon. Sin pasar por alto la aparición de Thomas Wayne, quien parece ser que no murió aquella fatídica noche en el Callejón del Crimen y que en nada se parece a la persona bondadosa y al respetado médico que todos nos imaginamos, con una personalidad que se asemeja mucho más a la de Hurt en Batman R.I.P. y su peculiar juego macabro contra Batman.
La historia que ocupa este tomo está lleno de matices y giros, completamente inesperados, de los que solo podréis salir airosos si prestáis la mayor atención posible y, evidentemente, yo no os desvelaré ninguna de estas sorpresas. El escocés llega al punto de meta de una manera brillante y con una historia que desembocará de manera directa en Batman INC., con un Bruce Wayne “renacido” y decidido a cambiar por completo la manera de enfocar su lucha contra el crimen.
En cuanto al apartado artístico la responsabilidad recae en Frazer Irving, cuyo dibujo es bastante oscuro, muy, pero que muy, peculiar y que a mi, si os soy sincero, no me termina de convencer en ningún momento. No creáis que aprovecho esta reseña para críticar de manera negativa, o tirar por tierra, el trabajo de este dibujante que se que cuenta con un buen número de fieles seguidores. Pero, si es cierto que desentona con lo visto previamente en esta misma cabecera y no termina de parecer un trabajo homogéneo (Batman y Robin), pero que su toque siniestro le sienta más que bien a la historia guionizada por Grant.
Este contraste no solo lo apreciaréis en contraposición con los dos anteriores tomos (Batman y Robin; Batman contra Robin), será notable en el último número que tenemos en el recopilatorio que hoy nos ocupa: Batman #700, que está dibujado por algunos de los mejores artistas del panorama más reciente.
Este número especial, titulado El tiempo y el Hombre Murciélago, nada tiene que ver con el arco argumental en el que estamos hoy centrados, pero es una historia realmente disfrutable. Todo un acierto por parte de ECC su inclusión en el tomo. Una historia que narra la resolución de un asesinato, en una habitación cerrada, en forma de paradoja temporal, problema que tendrá que ser solventado por el Batman original, por el actual Batman (Dick Grayson) y por el Batman del futuro, que ya pudimos ver de quién se trata en Batman e hijo.
En definitiva, estamos ante un broche de oro a la cabecera protagonizada por el dúo dinámico, a cargo de Grant Morrison, guionista que puede suscitar opiniones de lo más extremas pero es alguien al que no podemos negar su soberbio trabajo de documentación, conoce perfectamente toda la historia del personaje y juega con eso en todo momento. Una etapa, la suya, que dejará un legado durante muchos años en los que le sucedan al guión. Una etapa atrevida y valiente, que a mi simplemente me encanta.
En los albores del regreso de Bruce Wayne, Simon Hurt y el Profesor Pyg amenazan con convertir Gotham City en la nueva capital del crimen. Un maquiavélico plan que deberán desbaratar Batman y Robin, todavía consternados por la revelación de que bajo la máscara de Oberon Sexton se ocultaba en realidad… el mismísimo Joker.
Grant Morrison aborda un punto de inflexión en su ambiciosa etapa al frente de las aventuras del Hombre Murciélago, acompañado de un impresionante elenco de dibujantes –Frazer Irving, Cameron Stewart, Chris Burnham, Tony Daniel, Frank Quitely, Scott Kolins, Andy Kubert y David Finch– puesto al servicio de una historia tan sorprendente como épica.
EDICIÓN ORIGINAL: Batman and Robin, Batman
FECHA PUBLICACIÓN: Marzo de 2015 GUIÓN: Grant Morrison, Scott Kolins DIBUJO: Andy Kubert, Cameron Stewart, Chris Burnham, David Finch, Frank Quitely, Frazer Irving, Tony S. Daniel FORMATO: Cartoné, 168 págs. 4 tintas.