No podemos olvidar que Star Wars es para niños.
J.J. Abrams
Se acabó lo que se daba. Star Wars: El Ascenso de Skywalker cierra la tercera trilogía galáctica y da carpetazo a la saga de los Skywalker. Ya hemos hecho una crítica sobre la película sin spoilers, que podéis leer aquí. Como yo no escarmiento, me ofrecí a hacer la crítica con spoilers, para que todo el mundo pueda despotricar a gusto. Star Wars: El ascenso de Skywalker transcurre unos años después de Los últimos jedis. No es ningún secreto: el Emperador Palpatine está vivo, o por lo menos está vivo algo que se parece a él. Los héroes de La Resistencia intentan averiguar su paradero y destruir la flota fantasma que amenaza con destruir la galaxia. Tras este breve resumen del argumento, vamos a salirnos de la crítica convencional y a jugar a los listados. No voy a tratar de convencer a nadie porque ya lo intenté una vez y no lo conseguí. Así que vamos al lío:
A mi me ha gustado…
La dirección de J.J. Abrams. El director era muy reticente a encarar la dirección de El despertar de la fuerza, a la que accedió tras convencerle Steven Spielberg. Ante lo apretado del calendario, renunció a Los Últimos Jedis y regresó tras el despido de Colin Trevorow (quien figura como co-guionista). Hay algo que Abrams tiene que no tienen otros directores de su generación, ni siquiera Rian Johnson: el sentido del espectaculo y la capacidad para crear imágenes impactantes. Que si, que tiene mucho dinero a su disposición pero Johnson también lo tuvo y se queda un escalón por debajo. Star Wars: El ascenso de Skywalker es, a nivel visual, la mejor de esta última trilogía.
El ritmo. Por necesidades de atar cabos y borrar aciertos, todo va a toda castaña. No hay un momento de respiro para pararse a pensar en lo que está pasando, lo cual es también un acierto porque no dejan que te des cuenta de los fallos (que los tiene; luego lo hablamos).
La interacción entre el trío protagonista. Por fin, tras dos películas, Poe Dameron, Finn y Rey actúan juntos, dando la sensación de amistad que no se vio en las películas anteriores, más que nada porque no coincidieron en pantalla más que unos pocos segundos.
Que Kylo Ren se haya puesto otra vez el casco y no haya enseñado sus pectorales. Es paradójico: donde mejor está Adam Driver es en la película anterior pero es en esta donde mejor está su personaje. Ha recuperado su casco, dándole un aire más amenazador, ha dejado de ser un niñato histérico y cuando se pasa al lado de la luz apunta las maneras de héroe que tendría que haber tenido por herencia, muriendo como un auténtico jedi y encima besando a la chica. A todo esto, por si alguien no lo tenía claro, Adam Driver es un actor como la copa de un pino.
Las notas de nostalgia. Decía Juanma Marín en su crítica que lo fían todo a la nostalgia pero yo no estoy tan de acuerdo. El peso de la película cae en manos de los nuevos personajes. La aparición de Carrie Fisher y Billy Dee Williams (que se merecía volver) sirven más de apoyo que de motor de la trama.
La música de John Williams, quien hace un enorme mega-mix con todos los temas que ha compuesto para las 9 películas de la saga. Cada personaje con su tema, hay pocas películas donde la música tenga tanta importancia y ayude a remarcar la escena.
Que sea la película más Star Wars de toda la trilogía. Nuevos personajes, nuevos planetas, nuevos escenarios, soldados de asalto volando, los Caballeros de Ren, el Emperador, Lando Calrissian, batallas espaciales, luchas a espada láser,… George Lucas se planteaba cada película con la idea de introducir novedades en el universo que había creado. Es en esta donde Disney lo da todo. ¿Con la idea de vender más juguetes? Pues igual si pero es exactamente esa la idea que tenía Lucas cuando lo hacía. Y por favor, ahorraos en los comentarios el latiguillo de “está vacía de espíritu”, “le falta alma” y no se cuantos topicazos más que ya estamos cansados de oírlos. Eso, muchachos, está en vuestra cabeza, no en una película.
Los momentos épicos, que los tiene a pesar de que muchos no los vean. A destacar el regreso de Harrison Ford, que nadie esperaba a estas alturas; la aparición de Lando Calrissian, vistiendo el atuendo que Donald Glover vestían en Han Solo; la espectacular batalla final; el regreso a Tatooine para enterrar el legado de Luke y Leia; y por encima de todo el momento en que Lando Calrissian, cuando Poe Dameron se lamenta porque piensa que ha fracasado, le dice aquello de “Pero nosotros somos más, Poe. Nosotros somos más”.
Que el bien triunfe sobre el mal. Porque de eso va toda la saga, del bien triunfando sobre el mal. Una cosa muy necesaria en nuestros días. Lo voy a decir, aunque igual no debería: las alusiones a la situación política actual en Estados Unidos y en el resto del mundo están presentes en toda la trilogía y Abrams, Chris Terrio y compañía toman partido por un bando y quieren dejar claro que, a pesar de todo, hay esperanza. De ahí la frase de Lando de “nosotros somos más“.
A mi no me ha gustado…
Que algunos personajes simplemente pasan por ahí. Querido J.J., está muy bien que des trabajo a tus amiguetes. Santiago Segura también lo hace. Podemos dejar pasar que te hayas cargado a Greg Gruberg, el pobre ha muerto con honor; podemos pasar también que metas a Dominic Monaghan para hacer bulto; perdonamos que a Domhnall Gleeson le hayan pegado un simple tiro tras tres películas siendo uno de los principales histéricos de la galaxia; tiene un pase que te saques de la manga a Richard E. Grant porque es de lo mejor del reparto a pesar de lo poco que pinta; pero lo que no te vamos a perdonar jamás de la vida es que a Keri Russell le pongas un casco y se lo dejes puesto toda la película y no le des más protagonismo; y que no nos muestre más que los ojos por muy bonitos que los tenga. Que los tiene.
El ritmo. Se han pasado de ritmo. Demasiadas cosas al mismo tiempo. Hay momentos en que parece que más bien estamos en un videojuego y que hay que pasar de un nivel a otro resolviendo puzzles.
El guión. Esto… ¿qué queréis que diga que no se haya dicho ya? Podrían haber titulado la película como “Todo por la fuerza” y habrían sido más francos. Este punto y el anterior derivan del siguiente, que es:
Intentar borrar de un plumazo Los Últimos Jedis. J.J. Abrams ha querido deshacer lo que Rian Johnson había establecido con acierto, es decir que Snoke pintaba poco, que Rey no era nadie ni era parte de un legado y que no había que ser tan dogmático ni tan radical (esa escena con Yoda leyéndole la cartilla a Luke por los putos libros de los jedis es memorable). Ahora resulta que Snoke fue creado por Palpatine, que el legado de los jedis no hay que tomarlo a broma (“El arma de un jedi merece más respeto”, dice el fantasma de Luke) y que Rey es la nieta del emperador, que es el What the fuck más grande de toda la saga. Eso si, a la hora de quedarse con los hallazgos visuales de Johnson, como esos duelos a distancia entre Rey y Kylo Ren, no se ha cortado un pelo.
La falta de dirección en la última trilogía. Hay que ser francos: no han sabido a dónde iban desde el principio, ni cómo llegar ahí, ni nada de nada. Que no hubiese alguien al timón desde el principio, quien fuese, ha sido un error. Que J.J. Abrams se retirase tras el episodio VII, fue un error. Que Los Últimos Jedis continuasen de forma tan directa El despertar de la fuerza, fue un error. Dejar que Rian Johnson hiciese lo que le diese la real gana sin tener en cuenta que después tenían que parir otra película, fue un error. Querer obviar Los Últimos Jedis porque cuatro gatos pataleaban en internet, fue un error (y una cobardía). Querer meter en esta última película todo lo que se tendría que haber metido en la anterior, ha sido un error.
Que la gente se haya dividido tanto.
Vivimos una época de opiniones divisivas, vitriólicas y generalmente anónimas. Una de las cosas que más me gustaban de Star Wars de niño es que unía a la gente. Parece que siempre que hay una película de Star Wars o de Marvel hay gente que está hiperbólicamente cabreada por algo. Estamos en esto para entretener e inspirar con la historia. Si el precio de involucrarme en esto es que existan esas voces, pues vale.
J.J. Abrams
Esto se refiere a la trilogía en si pero, de verdad, ha sido alucinante. Cuándo yo empecé en esta web, todos estábamos ilusionados. Tras el episodio VII, el apocalipsis. Ya no fue cuestión de si estábamos acertados en nuestro juicio. Ya era cuestión de ver quién gritaba más alto. ¿De verdad valía la pena hacer una trilogía para que la gente se pelease o insultase en las rr.ss.? Ni idea, oye. El tiempo pondrá las cosas en su sitio. Esta ha sido una trilogía para una nueva generación de niños que seguramente la habrán disfrutado más que cuarentones que van llorando por las esquinas hiperbólicamente cabreados.
Y sin embargo, la volveré a ver
¿Por qué? Primero porque, como ya he dicho, me ha gustado a pesar de todos sus fallos. Me lo pasado genial y eso es de lo que se trata, no de amargarse la existencia. Y en segundo lugar porque, pese a quien pese, con sus aciertos y errores, al igual que las trilogías que la precedieron, sigue siendo Star Wars. Un saludo y que la fuerza os acompañe… siempre.
Suscribo cada palabra.
Con la de opciones de entretenimiento que hay hoy en día, no está la cosa como para perder el tiempo en algo que no te gusta.
En fin, aún nos quedan lustros de seguir escuchando los lloriqueos de los verdaderos fans.
Hola Manuel. Realmente es como dices, que con la cantidad de opciones que hay, entrar a ver algo de lo que ya pensamos que no nos va a gustar, no merece la pena. Y aun así hay quien lo hace. Esperemos que para la siguiente trilogía las aguas se hayan calmado. Por lo menos parece que The Mandalorian ayudará a eso. Gracias por el comentario y un abrazo.
Espectacular crítica, Pedro. Suscribo en absolutamente todo. A mí personalmente no me gustó demasiado (a ver, no es de mis Episodios favoritos para decirlo mejor), pero tampoco entiendo el apocalipsis que intentan provocar los “fans”. Sobre todo porque creo que varios de los errores de esta película, en especial todo lo relacionado a “borrar” el episovio VIII, es como vos decís, una reacción cobarde de Disney por los que se sintieron profundamente ofendidos vaya uno a saber por qué. Por poner un ejemplo, no fui fan del personaje de Rose en Los últimos Jedi, pero lo que le hicieron a esta chica de ponerla como adorno me pareció una falta de respeto. Sería preferible entender que no se puede contentar a todo el mundo antes que intentar quedar bien con un fandom bastante tóxico y que se iba a quejar de todas formas.
Por lo pronto, aunque no sea de mis favoritas, es entretenida y divertida, y seguramente la vaya a ver de nuevo para desmenuzarla mejor. Gracias por tus palabras Pedro!
Gracias a ti por las tuyas. Disney ha sido bastante cobarde en muchos aspectos. Para empezar, renegando de Los Últimos Jedis por mucho que J.J. Abrams vaya haciendo entrevistas diciendo que no, que que va, que él no ha desmontado nada; lo de Rose Tico es otra muesca en la cabecera, la tuvo que poner en la última película porque no le quedaba otra; y por último, han sido muy cobardes en el tema LGTBI, jugando a que si Poe estaba celoso de Rey por su relación con Finn para dejar claro que no mientras, al final, te plantan un beso lésbico como de tapadillo. Como decía el maestro Yoda: hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes porque al final puedes quedar como el culo. Bueno, esto es de mi cosecha. Un saludo, muchas gracias por leernos y Feliz Navidad.
Me eh quedado casi sin palabras después de leer tu crítica, mira que desde hace 4 años no paramos la discusión sobre lo bueno y malo de Star Wars, al final difícilmente sea cual fuera el producto final no estarían todos los fans contentos.
Nos ilusionamos 40 años con una historia que cada quien desarrolló eh imagino dentro de su cabeza, aunado al poder de convocatoria del internet, dieron por resultado una expectativa demasiado grande y muy difícil de llenar para los espectadores.
Esto sumado a la inminente falta de planeación e imaginación de Disney, dieron por resultado unas películas de buena calidad, que se disfrutan unas mas que otras, pero que no se sienten naturales dentro del universo de Star Wars.
Esperemos que en el futuro tengamos mejores producciones de “Una Galaxia muy muy Lejana”
May The Force Be With You Always
Hola Rogelio. Esperemos que si, que en Disney hayan aprendido la lección y que dejen la saga en manos de gente como Kevin Feige, que será todo lo que uno quiera pero que ha demostrado que a planificar no le gana nadie. Como dices, todos nos imaginábamos la continuación de la trilogía original a nuestra manera y seguro que no tenía nada que ver con lo que nos entregaron. Pero eso no quita que para los niños que se acercan a la saga por primera vez, esta nueva trilogía signifique lo que las anteriores significaron para muchos. Un abrazo, gracias por leernos y Feliz Navidad.
En general coincido, pero en dos cosas no. Una es la dirección. No parece el mismo JJ de TFA. La cámara no para de moverse, y no deja empaparse bien de los detalles del ambiente SW como hacían las dos anteriores.
Eso sin contar que es evidente que faltan muchos trozos de metraje. De golpe te das cuenta que muchas cosas ya han pasado, como personajes que aparecen de repente, situaciones resueltas en menos de un minuto, etc.
TLJ tenía escenas icónicas, como los deslizadores en Crait, la nave de Sonke partida por la mitad o la pelea contra la guardia roja. Esta película carece de cosas así. Lo único que se le acerca es el duelo en el oleaje.
Y tampoco me parece la más Star Wars. En ANH, RO, S y TLJ se establece que no se puede saltar al hiperespacio con un obstáculo delante, ni tampoco cerca de la superficie de un planeta. Pues al principio el Halcón lo hace 40 veces y aquí no pasa nada. Los TIE imperiales no tienen hiperespacio, pero Kylo usa uno que se teletransporta. Y así sin parar. Me parece una vulgarización, como en las pelis de Marvel, que no hace falta seguir el detalle porque sabes que los guionistas son muy descuidados y no se van a calentar la cabeza.
Y lo de que una nave sea capaz de destruir un planeta no tiene sentido alguno. Es más, anula el sentido de las DS.
Volveré a verla en 4DX, pero eso no quita que piense han pinchado.
Hola Exteban. Es verdad lo que comentas de que la cámara va y viene y no dejan empapar de los detalles pero eso es por el ritmo. No es tan pausado como en El despertar de la fuerza y es consecuencia de “tengo que cerrar la trilogía, tengo que contarlo todo, tengo que deshacer Los Últimos Jedis, etc”.
En cuanto a lo de las escenas icónicas de Los Últimos Jedis, si, las tiene pero los árboles no dejaron ver el bosque. La escena inicial es fantástica pero las bromas de Poe Dameron la ofuscaron; para mi, esta las tiene mejores pero ya va por gustos.
Y lo del sentido de los saltos del Halcón y los destructores que destruyen planetas… esto… a ver, si hemos aceptado a Leia Marie Poppins y que los jedis combatan a distancia, buscarle un sentido a eso es ya perder el tiempo. Un saludo y gracias por pasarte por aquí y dejar un comentario.