Introducción
Bienvenidos al análisis final de The Stand. La raza humana fue devastada por un virus y solo unos pocos supervivientes tendrán la difícil misión de continuar con la humanidad. Basada en la novela de Stephen King, nos espera un mundo lleno de misterios y horrores.
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El círculo se cierra
Hemos llegado al final de la serie. The Stand nos dijo adiós con este capítulo nueve llamado The Circle Closes (El círculo se cierra). Y tal como nos dice el título, el cierre es acorde a la buena temporada que tuvimos. El show inspirado en la novela de Stephen King en líneas generales fue bueno y no decepcionó.
El verdadero final lo tuvimos en el episodio ocho. Este sirvió para el romanticismo, para tocar los sentimientos profundos, las fibras más íntimas y darle un bonito final. “La frutilla del postre” como se dice. Un final ordenado y que dejó todas las piezas bien acomodadas, a tal punto de dejar abierta la puerta para poder realizar una segunda temporada.
El episodio se centra exclusivamente en Frannie Goldsmith. En ella recae la esperanza de la humanidad. Como una especie de Eva, ella será el la piedra fundacional para reconstruir y llenar de vida al devastado mundo. De su vientre nacerán nuevas vidas que le darán más sentido y multiplicara la población.
Stu, tal como en la novela, es rescatado por Tom y llegan a Zona Libre de Boulder. Tras un emotivo reencuentro con Frannie, emprenden un viaje con su amada y su hija para comenzar una nueva vida.
En ese viaje no podían faltar los imprevistos: Frannie cae a un aljibe cuando quería tomar un poco de agua fresca. Ese golpe de varios metros, le dejo muchos huesos quebrados y un encuentro muy fuerte con Randall Flagg que la invita a pasar al lado oscuro. A cabio, iba a sobrevivir a su fuerte caída y vivir feliz con su hija. Ella a pesar de la gran tentación que giraba en torno a lo que el villano ofrecía, desiste.
Así como siempre va existir la oscuridad, siempre va haber luz. Así como existe el mal, siempre hay algo bueno, y Madre Abegail se personifica en otro sueño para despertarla y ayudarla a salir de ese pozo. Le dice que ella es la esperanza de la nueva humanidad, que será madre de 5 hijos y ellos multiplicaran la población.
Es rescatada por Stu y Madre Abegail niña que le cura todos los huesos rotos. Todo muy ordenado y pulcro para llenar este noveno capítulo, que como dije en el análisis anterior, sentía que iba estar de más, y prácticamente así fue. Solo sirve para decorar lo anterior.
Como era de esperarse, y lo había anticipado en el análisis anterior, Randall Flagg no murió, y está bien que así sea. El bien y el mal, la luz y la oscuridad, siempre van a existir y van a convivir en el mundo, y en este caso, están personificados por Flagg y Madre Abegail. Buen final para una buena serie.
Conclusiones
La serie siguió demasiado la lógica de la novela. No tuvimos demasiadas sorpresas y era fácil anticiparse a todo lo que iba a suceder. Los creadores nos prometieron un final distinto. Pero tan solo fue decorativo, un bonito final, que de paso, deja la puerta abierta para una segunda parte que nunca fue confirmada.
Hubo buenas actuaciones, como la de Owen Teague (Harold Lauder), creo que fue la más sobresaliente. También me gustó el personaje de Nat Wolff (Lloyd Henreid) y me hubiera encantado ver más de la extraordinaria Whoopi Goldberg.
En fin, fue una buena serie, entretenida con un final lógico. Dado que ya traía una historia muy rica detrás, que en líneas generales, fue bien llevada a la pantalla chica.
Saludos y sed felices.
Gracias Javier por el estupendo artículo. En mi opinión, es unos de los trabajos literarios de Stephen King menos interesantes de su extensa biografía. No aporta nada nuevo la serie, no olvidemos que ya se realizó una miniserie de esta obra para TV en 1994, y el resultado para mí fué el mismo, poco contenido, poca sustancia, una especie de fábula pseudoreligiosa, poco trabajada. la diferencia con este remake actual es obviamente la producción, que ahora es de nivel muy superior.
Un saludo y sed felices!