Bruce Springsteen and The E Street Band: Diarios de Carretera es el documental que acaba de estrenar Disney+ y que se centra en la última gira de Bruce Springsteen, la que empezó en 2023 y terminará (o no) en 2025. Era un documental muy esperado por sus fans, entre los que me encuentro. Ahora bien, la verdad es que se han quedado algo cortos. Vamos al lío.
Palabra de Bruce, Amén
Bruce Springsteen and The E Street Band: Diarios De Carretera se centra en los preparativos y en la gira antes mencionada pero, pese a lo anunciado, no entra en los detalles. Resulta interesante y apasionante a ratos, y si eres fan se te cae la baba en algunos puntos pero, una vez visto, tampoco aporta demasiado. Ya sabíamos del compromiso de Bruce con sus fans, con la música y con el rock. No hacía falta lo que, en demasiadas ocasiones, es un ejercicio de auto-bombo.
Al inicio del documental podemos ver como se prepara la gira, desde los ensayos iniciales en un pequeño teatro hasta el ensayo general en un pequeño estadio que luego se reproducirá en grandes recintos. Sin embargo siempre lo vemos desde el punto de vista de los músicos, nunca se nos muestra lo que hay detrás.
Quedan fuera del documental aspectos como la gestión de la venta de entradas (punto muy polémico en esta última gira) o por qué se decide tocar en unas ciudades y no en otras, o la logística que implica mover todo el show de un lugar a otro, o la convivencia entre los miembros de la banda, si van al mismo hotel, que hacen en las ciudades que visitan, etc. Nada de eso se muestra en Bruce Springsteen and The E Street Band: Diarios De Carretera.
Creo que es la primera vez que oigo tantos comentarios y declaraciones de los miembros de The E Street Band (con excepción de Steve Van Zandt, quien cuenta con su propio documental en HBO y que resulta mucho más jugoso que este), quienes comentan aspectos de su jefe, sus manías y recuerdan anécdotas de los tiempos en los que iban en caravana y no en jet privado o en primera clase. Max Weimberg no puede dejar de reirse cuando ve que tras el escenario hay más de 50 guitarras y antes sólo tenían lo puesto.
Si nos queda claro (y esto es uno de los puntos interesantes del documental) que la experiencia Springsteen on Brodway (imprescindible, disponible en Netflix) ha marcado la gira. En ese espectáculo, Springsteen repetía el mismo show noche tras noche. Como él mismo afirmaba, era lo más cerca que había estado de tener un trabajo fijo en el que uno ficha y hace lo mismo día tras día.
Esa idea de un repertorio casi inmutable (y por la que le han llovido algunas críticas; el personal estaba demasiado acostumbrado a la sorpresa) es lo que hemos visto en esta última gira, que casi siempre empezaba con No Surrender (una declaración de intenciones) y terminaba con I’ll see you in my dreams, con un tramo final fijo y alguna sorpresa en medio.
Y es que Springsteen afirma que lo que ha pretendido es contar una historia, centrada en el paso del tiempo y en como se acerca el momento de la muerte. Y si uno se fija bien y presta atención, resultaba evidente. No Surrender habla de no desfallecer, de no rendirse; Ghosts (la siguiente del repertorio y además el apodo (Ghost) del desaparecido Danny Federici) nos dice en su estribillo que I can feel the blood shiver in my bones – I’m alive and I’m out here on my own – I’m alive and I’m comin’ home; y así seguimos hasta el final, pasando por el eje central del set list, Last Man Standing, donde ya resulta evidente que Bruce sabe que, de su primera banda de juventud, el será el siguiente en morir.
Hola Barcelona, us estimem Catalunya
La gira se inició en Tampa, Florida y fue recorriendo diferentes ciudades de Estados Unidos pero el punto de inflexión lo marca el inicio de la gira europea, en Barcelona, el 28 de abril de 2023. Antes, Springsteen le ha advertido a su nuevo percusionista que se prepare, que no ha visto nada como Barcelona. No en vano la relación de Springsteen con la ciudad viene de lejos y los catalanes siempre han alardeado de ello hasta ser muy, muy cansinos (lo llaman “El Bruce”, pronúnciese neutra la e de “El”).
Si, el público europeo es más apasionado y vive más los conciertos que el americano. Como dice Jon Landau en una escena, nunca Bruce fue más grande en Europa que en este momento. Sin embargo, tengamos en cuenta que el público europeo lo ve con cuentagotas y que sus conciertos implican un gasto tremendo, no sólo de entradas sino de hoteles, viajes, comidas, etc. Bruce mueve dinero. No tanto como Taylor Swift pero lo mueve, por lo menos en Europa. Y saber que lo verás pocas veces en tu vida (abstenerse los que afirman que llevan tropecientos mil conciertos detrás de él) hace que lo disfrutes más.
Y he de decir que yo estaba allí, en el punto del documental en el que suena (en el Estadi Lluís Company de Montjuic) My Love Will Not Let You Down, y ni soy catalán ni mucho menos lo era la señora norteamericana que tenía al lado y que se quedó en sujetador en medio de la pasión de la noche. Así que igual Springsteen cree (o le han hecho creer, que la promotora tiene su ideología) que el estadio estaba lleno de catalanes y que estos son los más entregados pero ya os digo que aquello era una auténtica Torre de Babel.
Prácticamente con el inicio de la gira en Europa y las declaraciones de fans europeos, termina el documental, finalizando con Tenth Avenue Freeze Out. No es la única canción que suena completa. Antes ya hemos tenido otras y eso ayuda a llenar el metraje, que tampoco es demasiado. Poca más de hora y media que apasionará a cualquier fan.
¿Es Bruce Springsteen and The E Street Band: Diarios De Carretera lo que llamamos puro fan service? Pues si no lo es, se le acerca bastante pero no me extraña porque, en los créditos finales, vemos que el propio Bruce Springsteen figura como productor ejecutivo (normal) y como escritor, lo que ya es más raro. Vamos, que Bruce ha hecho de Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo como.
Nos queda recomendar, porque tienen más chicha y son mejores, su espectáculo Sprinsgteen On Brodway (Netflix), que ya os digo que es muy bueno; el documental Steve Van Zandt: discípulo (HBO), mucho más apasionante que este; la propia auto-biografía de Springsteen, Bruce Springsteen: Born to Run y el libro Bruce: la biografía, de Peter Ames Carlin, que no resultan tan auto-complacientes como este Bruce Springsteen and The E Street Band: Diarios De Carretera. Un saludo, sed felices.
