Netflix ha estrenado una nueva serie de acción, El agente nocturno. Creada por Shawn Ryan (creador de The Shield), está basada en una novela de Matthew Quirk y protagonizada por Gabriel Basso y Luciane Buchanan. Con esta nueva serie parece que si, que Netflix ha encontrado el camino y que le ha tomado el pulso a las series de acción. Y es que El agente nocturno es una muy buena serie.
Acción nocturna
En un sotano de la Casa Blanca, el agente Peter Shuterland (Gabriel Basso) pasa las noches revisando informes mientras espera que suene un teléfono que nunca suena. Es el teléfono para emergencias de los agentes del programa Acción nocturna, un programa de contra-espionaje implementado por la presidenta de los Estados Unidos en persona.
Peter arrastra de si un pasado turbulento. Su padre fue acusado de traición y el mismo es sospechoso en un atentado con bomba en el metro, atentado que en realidad evitó. Ni que decir tiene que el teléfono que nunca suena sonará estando Peter de servicio. Al otro lado de la línea se halla Rose Larkin (Luciane Buchanan), una civil que no sabe nada de espías pero que está siendo perseguido por los asesinos de sus tíos.
Ambos deberán enfrentarse a todo un sistema corrupto donde Washington queda retratada más como un nido de víboras que como la capital de una nación. En muchos aspectos, El agente nocturno recuerda mucho a 24, la serie protagonizada por el tocayo del protagonista y que siempre es un referente a la hora de valorar una serie de acción. De hecho incluso comparten algún que otro actor, como DB Woodside.
Todo esto pone en marcha la trama de El agente nocturno, una de las series más vibrantes que hemos podido ver este año y que viene a confirmar que tras El nuevo recluta, Netflix ha encaminado bien sus pasos hacia un género que Amazon Prime parecía dominar completamente.
Nos gustan los refritos
Si, para ser sinceros hay que decir lo de siempre, que nada nuevo bajo el sol y ya todo está contado. Sin embargo mola mucho cómo lo han contado. El agente nocturno es en realidad un refrito de diversas de acción que nos sabemos de memoria pero funciona muy bien. Como ya hemos dicho, la serie es vibrante, de un ritmo endiablado que recuerda mucho a 24 (uno de los mejores elogios que se le puede hacer a una serie, la verdad).
Bien interpretada, bien dirigida, con una producción más que aceptable y con un guion que te agarra por el cuello en el primer episodio y te lleva de maratón hasta el episodio final, la serie cumple de sobra con el objetivo de entretener, contar una historia y en este caso, darle a Netflix una nueva franquicia y un nuevo héroe de acción. Otra cosa es que les salga a cuenta continuar con ella (que esperemos que si).
Y si no continúan, pues no pasa nada. Esta primera temporada de El agente nocturno invita a pensar que tendremos una segunda pero la historia queda suficientemente cerrada como para que no nos rasguemos las vestiduras si eso no sucede.
Lo que debe tener una serie
Hablaba con mi compañero Carlos Maria Porras de que hay series que quizás no tengan mucho caché pero que cumplen sobradamente con lo que debe hacer una serie, esto es contar una historia de forma digna y conseguir que regreses para ver el episodio siguiente. Aquí han estado muy acertados. De hecho la única crítica que está recibiendo El agente nocturno es su falta de originalidad, lo que tampoco es que sea mucha crítica.
Por si quedan dudas de si merece la pena ver la serie y para que sirva de orientación, El agente nocturno se halla un pelín (pero sólo un pelín, ojo) por debajo de El nuevo empleado. A su vez, las dos se hallan un escalón por encima de La lista final de Amazon Prime (demasiado espesa en algunos momentos) y al nivel de Reacher, (otra serie que enganchaba desde el minuto uno) quedando todas por debajo de la reina de las series de acción, Jack Ryan. Por lo menos este es el top que he conseguido improvisar de memoria en cinco minutos.
En resumen, El agente nocturno aporta un nuevo héroe de acción al mundo del streaming y esperemos que una nueva franquicia. Estaremos atentos a ver si nos anuncia un segunda temporada. Un saludo, sed felices.