Young Justice: Phantoms nos explica por fin de dónde surge su nombre en un capítulo centrado en la prisión más icónica del mundo del cómic, con el permiso del asilo Arkham: la Zona Fantasma. Asimismo, proseguirá la trama del Cuarto Mundo y se nos dará una sorpresa relacionada con una serie animada de DC que ha pasado discreta ante el gran público pero que sigue contando con fans incondicionales.
La pérdida de la esperanza
Ma’alefa’ak está harto de la opacidad de Darkseid y sus secuaces. Por ello, le pregunta a Lor-Zod, su jefe, cuál es su cometido. Este responderá explicando cómo su padre, el general Zod, acabó atrapado en la Zona Fantasma y los motivos que le llevan a intentar liberarlo, haciendo toda una apología del golpista kryptoniano. Paralelamente, la Legión de Superhéroes explicará a Bart Allen cómo necesitan recuperar a Conner para que inspire la creación del grupo que acabará derrotando a los terroristas de Krypton.
Mientras tanto, en Nuevo Génesis, ha llegado un nuevo visitante a la conferencia. Se trata de un viejo conocido de Kilowog el Linterna Verde, que en el pasado formó parte de los Linternas Rojas pero que ahora tiene un anillo azul que simboliza la esperanza. Sin embargo, parece que le queda poca, ya que se dispone a intercambiarlo por el anillo rojo que le dejó a nada menos que Metrón, el personaje del Cuarto Mundo más ladino de todos.
Young Justice: recuperando franquicias olvidadas
Si en anteriores reseñas me preguntaba qué pensaría de la serie alguien que no hubiera leído los cómics, me encuentro con la respuesta: no conocía a Raze, uno de los personajes principales de Linterna Verde: la serie animada. La serie presenta adecuadamente su conflicto con el frío Metrón, pero no se explica muy bien cuál es esa búsqueda que está llevando a cabo ni se expone con la claridad necesaria en qué consisten los distintos cuerpos de linternas que pueblan el universo.
Este sigue siendo el principal problema de la serie: demanda un conocimiento excesivo a sus espectadores. Este defecto se ha acentuado más desde el salto (¿hacia arriba o hacia abajo?) de la televisión al streaming, quizás tratando de captar a un espectador más experto en el tema. Si a esto le sumamos el hecho de que contamos con un elenco creciente y abrumador de secundarios, es fácil que la serie provoque confusión en gran parte de su público.
A pesar de ello, y sin un conocimiento previo del personaje, las escenas protagonizadas por Raze tienen una gran carga emocional, y el momento en el que recupera la esperanza habrá sentado muy bien a quienes llevan esperando nuevas historias de este antihéroe desde la cancelación de la serie de Linterna Verde.
Una prisión donde no pasa el tiempo
El papel que cumple Metrón en este episodio resulta una carta de presentación más que apropiada ante el espectador casual: como suele ser habitual en sus apariciones comiqueras, miente y manipula de manera descarada en su búsqueda del conocimiento, en este caso con el objetivo de estudiar los anillos de poder. Jack Kirby, su creador, lo diseñó como un actor neutral en la guerra entre Nuevo Génesis y Apokolips, que cambiaría de bando según le conviniera. Como curiosidad, antes de que Jim Starlin se fijara en Darkseid, Metrón fue la inspiración inicial de Thanos.
La Zona Fantasma, que aparece de manera prominente en este episodio, también se presenta de manera comprensible. Esta prisión, diseñada por el padre de Superman, apareció por primera vez en la Edad de Plata de los cómics y fue popularizada por Richard Donner en su Superman, donde vimos la icónica imagen en la que los prisioneros quedaban atrapados en un recuadro que viajaba a lo largo y ancho del universo. Incluso recibió su propia miniserie, guionizada por Steve Gerber y dibujada por Gene Colan, y lleva siendo una pieza fundamental de la mitología del Hombre de Acero desde su creación.
Por último, también echamos un vistazo a la Rueda Cósmica, una cinta de correr que Flash y los personajes derivados utilizan para viajar en el tiempo. Se trata de un elemento algo anticuado y ridículo de tiempos más inocentes pero que sigue manteniendo su encanto.
Conclusión
Aunque los problemas endémicos de Young Justice no hacen sino acentuarse en esta cuarta temporada, resulta admirable el modo en que los creadores consiguen hacer malabarismos con tantos elementos distintos del universo DC y los integran dentro de una ficción con sentido. Las piezas comienzan a caer en su lugar mientras nos vamos acercando al final.