Este capítulo lleva por título Vindicators 3: The Return of Worldender. Rick y Morty nos tiene acostumbrados a ver parodias de series, películas, libros… cualquier cosa puede ser objeto de broma y llevada con ingenio en esta serie. Ya sea Origen, Pesadilla en Elm Street, o sin irnos tan lejos, Mad Max. Este cuarto episodio de la tercera temporada no iba a ser menos.
Todo comienza en el garaje de la familia. Rick y Morty están trabajando en lo suyo con unos seres alienígenas y reciben la llamada de los Vindicadores. Un vendicador es el “que venga, que toma venganza, un vengador” (Wiktionary). Pero, aunque en primera instancia parezca una burla hacia Los vengadores, el tiro va más hacia los Guardianes de la Galaxia. Rick Sánchez y su nieto Morty, tras discutir, terminan por acudir a la llamada para salvar el mundo de los males que acechan.
Worldender, cuya traducción sería algo así como Destructor de mundos, es el villano al que toca derrotar. Desde el principio notamos la actitud relativista y nihilista de Rick, intentando quitarle hierro al asunto, sin darle ninguna importancia (y hasta burlándose) de la misión, de los superhéroes, del villano, básicamente, de todo. Pero la burla no corre a cargo exclusivamente de Rick, los propios superhéroes son una burla de los superhéroes. Así, tenemos a Millón de Hormigas, que, como su propio nombre indica, es un ser compuesto de un millón de hormigas. Además, un cocodrilo mitad robot; un hombre mitad fantasma cuyo superpoder principal es invocar un tren fantasma. Estos son los más estúpidos, después tendríamos a la líder, Supernova, que tiene una especie de fuerza estelar; y, finalmente, el guay del grupo, una parodia andante de Star-Lord (Peter Quill) de Guardianes de la galaxia. El capítulo en sí, va desmontando o atacando los tópicos de los superhéroes.
A Rick todo esto se la suda, salvo por Noob Noob (Novato Novato), el becario del grupo heroico que le ríe las gracias a Rick. Pasando el tiempo, Morty se entera de que esta misión no es la segunda de este grupo (Rick y Morty ya habían participado con los Vindicadores), sino la tercera. La vez anterior no quisieron contar con el científico y su nieto. Esto pone triste a Morty y Rick… bueno, Rick se emborracha y lo encuentran al día siguiente rodeado de su propia mierda en la mesa de reuniones. El pobre Noob Noob no podrá ir a la misión porque tiene que limpiar las heces del señor Rick.
Al llegar a la base del Destructor de mundo… ¡Sorpresa! Toda la cuadrilla del villano está destrozada, cuerpos mutilados y el propio Destructor está despedazado. ¿Qué ocurrió? Rick, estando borracho, hizo todo eso y, además, improvisó unas trampas al más puro estilo Saw (segunda parodia de cine del capítulo) para encerrar y poner a prueba a los Vindicadores. Es decir, un viejo ebrio acabó con la mayor amenaza de la galaxia y pone contra las cuerdas a los superhéroes, ¿por qué no consideramos al propio Rick un superhéroe? ¿Cuál sería su superpoder? Súper-inteligencia, ¿no? Ya veíamos en el capítulo anterior lo que es capaz de hacer siendo un maldito pepinillo. No importa como lo veamos nosotros, lo importante es cómo lo ve Morty. Morty estaba extremadamente ilusionado por poder pertenecer al grupo heroico de los Vindicadores y detestaba las faltas de respeto de su abuelo, a pesar de que su abuelo muy probablemente sea el ser más poderoso de ese universo. ¿Por qué? Porque Rick no tiene un halo de pomposidad alrededor, porque es burdo, a ratos grotesco y maleducado. Porque no tiene el carisma que nos han enseñado a amar de los superhéroes ni sus valores. Rick pone en entredicho lo bueno y lo malo, mientras que un superhéroe sabe en todo momento lo que está bien y lo que está mal y siempre hará el bien. Morty quiere un Guardianes de la galaxia y Rick lo máximo que le ofrece es una versión bizarra de Watchmen.
Como sea, las pruebas se van sucediendo y los superhéroes van muriendo. Aquí salen a flote sus miedos, sus discusiones, sus lados más oscuros; se deconstruye la figura de héroe para reflejar que en realidad son seres detestables.
El final es maravilloso. La última prueba requiere que se coloque en el centro de la sala lo único que Rick desea de los Vindicadores. Morty propone al principio que la respuesta es nada. De esta forma se explicitaría lo nimio que son los Vindicadores para él. Pero, se aventurar a responder Morty. Sí, tal vez el genio loco quiera que su nieto vea en él a un héroe, que lo respete y admire, que sienta por él lo mismo que siente por los Vindicadores. Morty se coloca en el centro y desaparece por una especie de túnel en el que el Rick borracho que ha preparado todo le habla, se pone sentimentaloide. Al final Rick tiene corazón y le tiene a cariño a Morty. Así sería en una serie al uso, pero esta no, compañeros. La respuesta correcta a la prueba era Noob Noob. Sí, el becario que le reía las gracias a Rick, pero como se tuvo que quedar en la base a limpiar mierda, no pudo presentarse. Morty, lógicamente se enfada.
Todo acaba con una fiesta que también había montado el Rick borracho y en la que un rapero canta en honor a Noob Noob, un personaje al que Rick ya ni siquiera recuerda. El mensaje es algo así como: Todos somos héroes, pero lo más importante es que no somos importantes.
Precisamente lo bueno de las parodias de Rick y Morty es que saben desligarse del original‚ más allá de la premisa‚ y no parodiar “por escenas” como Los Simpsons‚ por ejemplo. Siempre logra sorprender.