Bienvenidos a un nuevo análisis de Superman & Lois. Esta vez toca el capítulo 2 de la tercera temporada titulado “Fuerzas incontrolables” en la que los responsables de la serie deciden subir las apuesta y dar un duro golpe personal a la familia Kent mientras conocemos más cosas de los antagonistas de esta temporada.
Enlace a los análisis anteriores de Superman & Lois.
El episodio comienza con Lois sometiéndose a las pruebas médicas que tenía pendientes. Mientras suena una música triste y ominosa vemos como está desconectada de su familia y amigos así que ya sabemos que el tema tiene que ser grave.
Mientras, Sarah quiere “normalizar” la vida de Nat en este universo así que buscan en internet al chico que le gustaba a Nat en su universo y descubren que va a dar una fiesta en Metropolis a la que se apuntan sin más. Sarah no se lo dice a su madre ya que como está tan liada total no se va a enterar, aunque su amiga si se lo dice a su padre por que ya sabemos todos que es una gran chica.
Clark, Lois y Chrissy descubren que la jueza Reagan de Metropolis fue la responsable de la liberación de Atom-Man y deciden entrevistarla con la escusa de saber su opinión sobre la reforma judicial. Aunque Lois quiere ir sola a Metropolis, Clark la convence para acompañarla.
Lana recibe una llamada de George Dean en la que el exalcalde dice que todo lo hizo por el bien de Smallville. Pero lo aterrador es que mientras está hablando es atacado por Onomatopeya, que acaba con él sin piedad mientras Lana oye todo lo que está pasando. Más tarde Kyle y Chrissy se conocen un poco más mientras están en el lugar del crimen y Lana decide llamar a Sarah para contarle lo que ha pasado ya que es la chica es amiga del hijo del fallecido.
Jonathan recibe una invitación de Eliza, su ex, para ir a una fiesta en Metrópolis y convence a su hermano Jordan para ir juntos. Es una buena idea intentar conocer más chicas para olvidar a Sarah. Ni que decir tiene que la fiesta es la misma a la que van Nat y Sarah. Las jóvenes descubren allí que el chico que da la fiesta es un capullo mientras que Jonathan tiene una conversación con Eliza donde la chica le pide volver, aunque el joven le dice que es imposible porque tiene novia (algo que desconocíamos y que puede ser cierto o ser una excusa). Nat conoce a un joven interesante llamado Mateo y Sarah y Jordan acaban encontrándose para por fin, aclarar las cosas entre ellos y quedar como buenos amigos. Pero la fiesta acaba en desastre cuando el dueño de la casa se muestra como un verdadero cretino y nuestros amigos tienen que marcharse dejándole en ridículo. adiós al pobre Mateo.
Lana va a buscar a su hija a casa de los Irons y allí John le dice que está con su hija de fiesta en Metrópolis. El cabreo de Sarah es monumental, aunque se queda con John a cenar y le cuenta su conversación con George Dean. Antes de morir mencionó “el orgullo de Smallville”, una frase que recuerda que está en el escudo de la ciudad en su oficina. Allí descubren detrás del escudo un pen-drive aunque cuando van a ponerlo en un portátil aparece Onomatopella y les ataca, recuperando el pen y dejando a la pareja hecha polvo.
Cuando Lois y Clark hablan con la jueza a esta le cambia la cara cuando le mencionan a Atom-Man. Dice que conmuto su condena ya que tenía un tumor cerebral terminal y se queda de piedra al saber que ha sobrevivido varios meses y que tiene poderes. Aunque Clark sabe que está ocultando algo, llega un misterioso hombre que pone fin a la entrevista. También sabe que su mujer está preocupada pero no la presiona.
Ante la sorpresa de Lois la jueza Reagan aparece en la azotea de los juzgados decidida a suicidarse y dejando claro que es por el asunto de Atom-Man. Descubrimos también que el hombre que llegó a interrumpir la entrevista trabaja para un Bruno Mannheim que tiene una conversación con Superman en la que deja claro que él es quien manda en su barrio, es el héroe en su parte de Metrópolis y no le da miedo el Hombre de Acero. Superman tiene que marcharse para salvar a la jueza a la que Lois intenta convencer para que no salte diciéndola que acaba de saber que tiene un cáncer agresivo mientras su marido la oye. Nuestra protagonista se desahoga y se sobrepone diciendo que va a luchar contra su enfermedad igual que la jueza tiene que hacerlo contra los problemas que tiene. Al final Reagan decide no saltar mientras Lois y Superman se funden en un tierno abrazo.
En la granja Lois y Clark hablan de la enfermedad, un cáncer mamario inflamatorio, poco común pero muy agresivo. Lois se disculpa por no haber dicho nada antes, pero Clark la comprende y le brinda todo su apoyo.
En Metrópolis, Bruno está en el laboratorio secreto donde tienen a Atom-Man (que acaba muriendo) y cuando llega Onomatopeya (descubrimos que es una mujer) le dice que John Henry Irons está vivo, aunque pensaban que ya le habían asesinado.
El capitulo acaba cuando Jordan y Jonathan llegan a la granja y sus padres les hablan de la enfermedad de Lois.
Valoración del episodio
Tengo sensaciones encontradas con este capítulo. Aunque tengo que reconocer que los responsables han sabido jugar muy bien sus cartas y hacerlo muy emotivo, hay varias cosas que creo que no acaban de funcionar del todo. ´
En la parte positiva, tenemos como se trata todo el asunto del cáncer de Lois. Esta serie siempre ha sido algo más que Superman pegándose trompazos contra el villano de turno. Su tema central es la familia y como se apoyan unos a otros. Es muy emotivo ver como Lois empieza alejada de los suyos, intentando sobrellevar ella sola la carga de su enfermedad, para al final, contárselo a su marido y a sus hijos e intentar entre todos luchar contra el cáncer.
El problema es que no me creo que Lois vaya a morir. Así de simple. Incluso se nos muestra una manera en que nuestra protagonista puede burlar a la muerte. Los experimentos de
ya salvaron a Atom-Man así que creó que la trama puede ir por este camino. Será interesante ver lo que Superman está dispuesto a hacer para salvar a su mujer y si esta salvación puede tener un precio demasiado alto. Teniendo esto en la cabeza, resulta complicado que la amenaza de la enfermedad sobre Lois tenga el impacto que los guionistas buscan. Ya se que es una serie de superhéroes y este tipo de soluciones están a la orden del día, pero en este caso no me acaba de convencer.
En otro orden de cosas, el melodrama juvenil vuelve a ganar peso. Toda la historia de la fiesta en Metrópolis me parece insulsa e insustancial, contrastando además con el tono emotivo la trama principal. Al menos parece que Nat va a ganar peso en la historia y eso es algo que se agradece. Y se confirma la idea de las nuevas parejas que ya habíamos anticipado en el capítulo anterior. Otra historia que también me parece muy aburrida.
Al menos los villanos están bastante bien tratados. Vale que la típica conversación de machitos marcando terreno que tienen Bruno y Superman la hemos visto mil veces, pero está bien llevada y el antagonista tiene la suficiente presencia para resultar interesante. Y Onomatopeya da más repelús con cada aparición. Todo un acierto de personaje. Como también es un acierto su relación con John Henry Irons.