Bienvenidos un sábado más a la sección de los amantes del cómic. Bienvenidos a El cómic de la semana. Hoy destacamos el penúltimo número de la estancia de Jason Aaron en la colección del maestro de las artes místicas, Doctor Extraño 19.
¿Por qué me centro en este número y no en el siguiente?
Ojo, que nadie ha dicho que el número 20 y útimo de la estancia Jason Aaron en la colección no será también el cómic de la semana. ¿Por qué no tendría que serlo? ¿Por qué tendría que serlo? El próximo número será un número especial y a la vez epílogo a esta maravillosa etapa. ¿Y esté cómic? Es el último de la saga que empezará meses atrás, casi dos años vista.
En primer lugar cerramos el círculo de “esa cosa” cerrada en el sótano y que ahora posee a uno de los personajes secundarios más olvidados del Universo Marvel: Wong. Gracias al cine, este secundario ahora ya está de moda y no pasará tan desapercibido a la gran familia Marvel. Creo que uno de los aciertos de Aaron ha sido dotar al ayudante de Stephen de una personalidad inherente y menos ligada a la sumisión. Y no quiero decir que no haga las labores de mayordomo, pero realmente más que un ayudante o mayordomo parecía una especie de súbdito sin sentido alguno. Ahora Wong es otro personaje pero nunca sin perder su dedicación al maestro de las artes místicas, o también conocido como el Hechicero Supremo.
Desde pequeño había leído al buen Doctor como un experto en la magia, y que se enfrentaba a grandes demonios de otras dimensiones así como a grandes brujos cuyo poder rivalizaban con el suyo. Pero Aaron le ha dotado de un plus. Si antes hablaba de Wong ahora tengo que hablar de Stephen Strange, porque aunque es el mismo hechicero de siempre, a la vez ya no lo es, ha cambiado. Ahora comprobamos todos los sacrificios que ha tenido que hacer para convertirse en lo que es. Supongo que si juegas con la magía algo de tu ser tienes que perder en el camino. Y no sólo eso, la magia ya no son solo colorines y poner las manos de maneras surrealistas con los dedos doblados. No, ahora la magia ya no es bonita, ahora es sucia y en blanco y negro.
Jason Aaron y Chris Bachalo me hacen creer
El doctor Extraño nunca ha sido una colección superventas en Marvel, ni tampoco creo que podamos enumerar de carrerilla etapas míticas del personaje. Hablamos de un personaje secundario que muchas veces ha pasado de puntillas por todo este mundillo del cómic. Hablo de memoria, pero en los 80 la etapa de Rogern Stern (superguionista muy olvidado por los fans) es superlativa y… poco más. ¿Qué puedo meter los primeros números del buen doctor en Strange Tales? Vale, son cómics muy correctos, pero no son magníficos.
Ahora todo ha cambiado y debido al resurgir de las películas de superhéroes, y a la necesidad de Marvel de expandirse más allá de los Vengadores tradicionales, le llegó la oportunidad a este héroe. Y ya no se puede hablar de secundario. Quziás no es primera espada pero no es realmente un peón del tablero. El doctor Extraño ha vuelto para convertirse en un paladín más de la justicia, un héroe peculiar gracias a la gran pantalla y gracias a la serie de cómics que en España publica Panini. Los autores han sido de lo mejorcito que Marvel ha podido escoger. Jason Aaron, un guionista de esos que podemos decir Top y Chris Bachalo, un dibujante estrella cuyo trabajo se podría calificar de barroco, justo lo que un personaje como el Hechiero Supremo podría necesitar.
Un número mítico y una colección interesante para todos los que quieran leer las aventuras del Doctor Extraño y sus ayudantes en el Sanctum Sanctorum, esa casa mítica y peculiar situada en Greenwich Village de Nueva York.
El penúltimo capítulo de etapa de Jason Aaron y Chris Bachalo. Señor Agonía ha secuestrado a Wong y está usando todo lo que el mejor amigo del Doctor Extraño sabe acerca de él. El Hechicero Supremo debe derrotar a la entidad sin causar la muerte de Wong.
Autores: Jason Aaron y Chris Bachalo
Un saludo y sed felices.