Espectacular final
Para ver los análisis anteriores pincha aquí
Y llegó el final de Heels. Esta serie que nos sacó tantas sonrisas y lágrimas, pero sobre todo, nos dejó con muchas ganas de continuar con esta fabulosa historia que va camino a ser una de las mejores del año. Y para alegría de todos sus fans (entre los que, sin lugar a dudas, me incluyo), ya está pactada una segunda temporada.
Este octavo capítulo que se titula Double Turn (Doble Vuelta) fue el gran final de Heels. Y sin lugar a dudas, estuvo a la altura de las circunstancias y de esta serie que le robo el corazón a más de uno y que quedará para siempre en la memoria de sus fans.
Con actuaciones consagratorias, como la de un herido Jack por su previsible separación. Con mucho dolor, se da un dialogo espectacular y sentido entre Staci y Spade. Tal como había dicho en el análisis anterior: el involucramiento de Jack en el lanzamiento de pañuelos iba a ser la gota que rebalsaría el vaso, y así fue.
Jack debe lidiar con el dolor por su ruptura, y la adrenalina y ansiedad que le provoca la gran Feria Estatal que está a la vuelta de la esquina. Con entradas agotadas, más de diez mil personas esperan por él, Ace y Wild Bill Hancock.
Con las cartas servidas sobre la mesa, Jack quiere la reivindicación de su hermano, que la gente lo aclame, que vuelva a ser un héroe. Está convencido que privarle ciertas libertades, sobreprotegerlo sin dejar que decida por sí mismo, fue una forma de cuidarle, cosa que no hizo su padre para con él. Pareciera que el mayor de los Spade no era su hijo por la forma en que lo trataba.
También debo hacer un párate para hablar de Wild Bill Hancock y la fabulosa frescura e irreverencia que le aporta a Heels. Fue increíble como se fue haciendo un lugar en el trascurso de estos ocho capítulos, hasta llegar a ser uno de los personajes más importantes y entrañables.
En la próxima temporada seguramente conoceremos más de la historia que trae detrás este gran personaje. Cómo fue la relación con Tom y su fallido amor con Willie. Creo que en la segunda parte (que ya está confirmada) ahondaremos más sobre la vida de Hancock.
Todos tuvieron sus minutos de fama, y este gran final debía ser feliz para la solidaria y muy humana Crystal. Ella siempre ponderó el bien común sobre su brillo propio.
Siempre demostró su talento, pero esperó su momento sin ninguna queja. Aceptó ser valet a pesar de que tenía muchas condiciones para ser una de las mejores luchadoras de la liga. Y tanta paciencia tuvo sus frutos frente a los ojos de los más de diez mil espectadores. Allí pudo mostrar de cuánto es capaz y se quedó con el preciado cinturón.
Conclusión Final
Vivimos una tremenda temporada de principio a fin. Tal vez Heels no tuvo la publicidad de otras series, pero el brillo y la profundidad que mostró estuvo a la altura de las mejores del año.
El final fue espectacular como nos acostumbró, con giros en la trama que nos dejaban atónitos. Este octavo episodio no fue la excepción y la consagración de Crystal estaba fuera de cualquier apuesta.
Los personajes para destacar son: Jack con su testarudez y formas un poco dictatoriales, pero que a su parecer, son para proteger a su inmaduro hermano Ace.
El extrovertido Hancock, que aportó mucha frescura y humor. Fue de lo mejor de la serie. Me divirtió mucho cada intervención suya en la pantalla. También es destacado lo de Willie, con su seriedad, su antipatía, pero con gran pasión y fidelidad hacia la liga.
Los demás personajes deben ser desarrollados mejor, incluido Ace y Crystal. Creo que el menor de los Spade va a dejar de luchar para comenzar su sueño en el Fútbol Americano, tal como lo destacaba su padre. Fue muy duro para él enterarse que su hermano estuvo detrás del lanzamiento de pañuelos.
Saludos, hasta la próxima temporada.