En La liberación, Ebony Jackson (Andra Day), es una madre soltera con dificultades que lucha contra sus propios demonios. La mujer se muda con su familia para empezar de cero a una casa que guarda un terrible y antiguo secreto. Sin embargo, unos sucesos extraños en la nueva casa levantan las sospechas de los servicios sociales y amenazan con destruir a la familia.
Ebony pronto se ve inmersa en una batalla por su vida y por el alma de sus hijos, en una lucha del bien y el mal que le hará plantearse sus creencias. La liberación está basada en una historia real. Una versión desafiante del género que aborda la oscuridad, la posesión y la búsqueda de un poder superior.
La liberación: una historia repetida.
Así es como Netflix nos presenta su nueva película estrenada a finales de agosto. Se trata de una nueva historia de exorcismos protagonizada por una asustada familia a la que un demonio empezará a acosar para atraerla hacia él.
Da la casualidad de que esta familia ya tiene lo suyo encima. Con una madre con tendencias destructivas que hace difícil la convivencia con sus tres hijos, los cuales tienen que lidiar sus propias guerras encabezadas por el abandono de su padre hace unos meses.
Y por si todo esto fuera poco está Alberta (la gran Glenn Close sin duda el mayor atractivo de la película), la madre enferma de Ebony que vive con la familia desde hace poco. La relación madre e hija siempre ha sido pésima y esta nueva convivencia solo hace que ir de mal en peor.
La liberación no da miedo. Su historia previsible no ha sabido desmarcarse de otras miles que ya hemos visto y que son exactamente iguales a esta. Ni siquiera la coletilla de ‘basada en hechos reales‘ (la película está basada en lo acontecido a LaToya Ammons, cuya casa de Indiana supuestamente estaba embrujada por espíritus) hace que sientas si quiera cierta inquietud.
Su director, Lee Daniels, comentó en una entrevista para Netflix, que pretendía dar una nueva visión a las películas de posesiones con La liberación. Su intención era crear un paralelismo entre la tortuosa y desafortunada vida de Ebony y los hechos demoníacos que acechan a su familia. Algo que no ha funcionado tan bien como él pensaba, y como prueba está el 5 de media que los espectadores le han dado en IMDb.
La liberación deja de lado su tono paranormal para centrarse en los problemas de Ebony. Solo muy de vez en cuando tendremos esas pinceladas de terror, carentes de alma y que solo son una copia de otras que ya hemos visto anteriormente. La falta de efectos especiales tampoco favorece esta trama previsible que navega hacia un final que no sorprende a nadie.
Tráiler de La liberación.
