Bienvenidos a Las Cosas que nos Hacen Felices y a los cómics que no lo hacen tanto. Hace unos días se publicó en España el tercer y último tomo de Batman: Condenado de Brian Azzarello y Lee Bermejo y, pese a que mi pasión por Batman me suele hacer ser algo indulgente con las historias del caballero oscuro, no puedo evitar sentirme decepcionado con este título de Black Label, pues esparaba más de este tándem.
Juanjo ya analizó el primer tomo en este artículo y como ambos coincidimos en nuestra opinión sobre este título, hemos decidido que sea yo quien de la puntilla a esta primera obra original del sello Black Label.
No habrá spoilers en esta reseña, aunque (como suele decir Loulogio) si los hubiera podrían ser considerados una buena obra por mi parte, ya que os ahorraría algo de dinero.
Malos tiempos para la lírica
La premisa sobre la que partía este Batman Condenado se antojaba más que interesante: Joker ha aparecido muerto y Batman no recuerda nada. No es nada original eso de jugar con la amnesia pero se nos abría todo un campo fértil para plantar con las mejores ideas del gran guionista que es Brian Azzarello y dejarnos una impresionante obra para lanzar este nuevo sello más adulto de DC. El primer tomo me decepcionó bastante, pues me pareció confuso y grandilocuente (como ya explica muy bien Juanjo en su artículo) pero decidí darle otra oportunidad. Dicen que no es como empieza, sino como termina… y ahí está el problema: en cómo termina.
En mi opinión Azzarello está muy lejos de su mejor versión y podemos decir que esta obra no va a pasar a la historia y es una pena porque era el primer ladrillo de esta nueva etapa editorial. El guionista nos entrega una historia en la que trata de mezclar la amnesia de Bruce Wayne con elementos místicos de la mano de personajes de, lo que podríamos llamar, La Liga de la justicia oscura (Constantine, Zatanna, La Cosa del pantana, Deadman) y lo adereza con la lucha del protagonista con sus demonios internos. Muchos ingredientes que en lugar de mejorar la receta la convierten en un batiburrillo de sabores que no nos deja disfrutar de lo que debería ser algo de cinco estrellas. Azzarello no es Morrison y eso debería tenerlo claro, porque el escocés loco sí sabe confundir y dar las dosis justas de locura para que te sientas abrumado pero siempre de forma coherente para su historia. Batman Condenado trata de ser misteriosa a la vez que intimista y se queda en tierra de nadie y muy lejos de ser algo memorable en este año que se cumplen los 80 años del nacimiento del caballero oscuro. Leídos los tres tomos de esta mini-serie me encuentro en posición para decir que es (en mi humilde opinión) la peor obra de Azzarello que ha caído en mis manos. Un mal comienzo para el sello que ha nacido para ocupar el lugar del mítico Vértigo que tan buenas historias nos dejó y que tiene un enorme hueco en el corazón de los lectores más adultos.
Con lo bonito no se come…
Este cómic nos da una de cal y otra de arena (nunca sé cuál de las dos es la buena) y la parte positiva la tenemos de la mano de Lee Bermejo. El artista nos entrega páginas impresionantes que nos van a dejar con la boca abierta… pero nada más, pues le falta un guion sólido detrás que sustente todo su sublime trabajo.
Bermejo convierte a Gotham en un ser tenebroso con entidad propia y tal protagonismo que en ocasiones opaca a los personajes. Su narración y diseños, con una alta dosis de realismo, son brillantes y nos rescata de la decepción y el tedio en el que Azzarello insiste en meternos en muchas partes de esta obra. No veo necesario seguir hablando del apartado gráfico por que la palabra excepcional lo resume perfectamente y es por ello (y por el formato de la edición) por lo único que puede merecer la pena la adquisición de esta obra.
Conclusión
La palabra decepción puede describir lo que sentí al terminar de leer la última página de esta esperada obra. Del Tandem Azzarello-Bermejo esperaba muchísimo más (el segundo no me ha decepcionado) y sobre todo al ser la obra con la que se estrenaría el sello Black Label. Junto a la Wonder Woman de Rucka, aquí estaban mis esperanzas para disfrutar de una etapa fértil y de la libertad artística que nos vendió DC cuando presentó este sello. Lo próximo es el Superman: Año Uno de Miller y Romita Jr. y he de reconocer que ese tándem me da más miedo que confianza. Hasta aquí mi momento hater de la semana, ahora solo espero y deseo que el resto de obras despeguen y aumenten su calidad.
Si esto os ha dejado un mal sabor de boca, os dejo aquí nuestra guía de lectura del caballero oscuro.
Saludos desde el sótano de la batcueva.
Azarello lleva ya un tiempo sin estar bien.
Bermejo bendice nuestros ojos.
Leída en digital para ver si me acercaba, coincido bastante contigo.
Casi qeu me alegro de que no haya funcionado para que ECC no siga hinchando sus precios con grapas en tapa dura; aunque viendo cómo se ah agotado en tiendas y la cantidad de gente que lo tiene en Whakoom… ECC es la que ha ganado sin duda.
Un saludete.
Coincido: Bermejo hace un trabajo excepcional… como siempre. Creo que no hace falta que funcione para que infle los precios. Batman Last Knight on Earth es una grapa doble y por ser tapa dura y Black Label le han puesto un precio de 11 euros. Creoque están siguiendo la estela de Panini que subió los precios.
Eso digo, que sí ha funcionado a nivel de ventas, así que, seguirán por ese camino, como bien dices con lo nuevo de Snyder/Capullo; una subido de precios y de formatos innecesarios con la que adelanta a Panini. Parece que se están peleando por ver quién estalla antes la burbuja.