En pocos días más se estrena Napoleón, película de Ridley Scott en la cual Joaquin Phoenix da vida al célebre militar, líder y político francés. A lo largo de la historia del cine han sido muchos quienes lo han hecho, tanto que resulta imposible contarlos, pero hacemos un repaso de diez grandes actores que hicieron de Napoleón en la pantalla grande…
El gran corso, el genio de la guerra, el gran estratega, el ogro de Ajaccio, el usurpador universal o el pequeño cabo son algunos de los apodos con que, a veces exaltándolo y otras despreciándolo, se ha hecho referencia a Napoleón Bonaparte, personaje controvertido si los hay ya que algunos lo ven como quien expandió fuera de Francia los ideales de la revolución francesa y otros, por el contrario, como quien los traicionó…
Quizás hayan sido un poco las dos cosas, pero lo cierto es que este viernes se estrena mundialmente Napoleón, la película de Ridley Scott en la cual el polémico militar francés es encarnado por Joaquin Phoenix y de la cual pueden ver aquí el primer y segundo tráiler. Una buena oportunidad para repasar diez grandes actores que lo interpretaron, aclarando desde ya que es una lista incompleta ya que los que se calzaron el gorro bicornio han sido muchísimos e imposibles de contar por las muy diversas cinematografías nacionales que han abordado tamaño personaje histórico.
Por lo general, en el cine francés se lo suele representar como un héroe con sus defectos o, a lo sumo, demasiado enceguecido por su amor a Francia. En el cine anglosajón, en cambio, suele ser retratado como tiránico, ambicioso, caprichoso o a veces incluso ridiculizado.
Aclaramos que se trata exclusivamente de interpretaciones en cine y no incluimos las televisivas, que también han sido muchas. Como dato al margen, de los diez que integran la lista ya siete están fallecidos, lo cual habla a las claras del tiempo que llevan los cineastas recreando su figura.
De hecho, la primera interpretación de Napoleón en pantalla data del siglo XIX. Sí, están leyendo bien: un corto de menos de un minuto de 1897 (cuando el invento de los hermanos Lumière tenía solo dos años) muestra un encuentro entre él y el Papa Pío VII.
El mismo llega a nosotros gracias a una versión coloreada a mano que sobrevive en la Cinemateca Francesa y la trama, obviamente muda, muestra a Napoleón en Fontainebleau queriendo convencer al Sumo Pontífice de algo que le niega, por lo cual se retira ofuscado: probablemente el desacuerdo tenga que ver con el famoso Concordato con el que Bonaparte buscaba poner al papado bajo control estatal.
El corto (para ese entonces, obviamente, no considerado como tal) está dirigido por Alexander Promio, Gaston Bretteau y Georges Hatot, que es quien justamente interpreta al militar francés. La actuación se ve sorprendentemente buena para la época, pero la escasa duración hace que no podamos incluir a Hatot en una lista selecta de quienes dieron vida a Bonaparte. No obstante, me ha parecido justo mencionarlo y de paso mostrarles el corto, que tiene en sí mismo tanto valor histórico como la propia escena que recrea.
Dicho ello, al listado…
William J. Humphrey
Actor y también director británico que, en los inicios del cine mudo, estuvo muy ligado a las primeras adaptaciones cinematográficas de Shakespeare y Dickens. Manteniéndose en la línea de cine de época, dio vida a Napoleón Bonaparte en dos cortos de trece minutos cada uno, los cuales, dirigidos por James Stuart Blackton, fueron Napoleón y la Emperatriz Josefina y Napoleón: el Hombre del Destino.
El primero, de 1907 y como su nombre lo indica, trata sobre el amor entre el general francés y Josefina de Beauharnais, su pareja más célebre. El segundo, basado en una obra de teatro de George Bernard Shaw, funciona como secuela del anterior y cuenta la historia de Napoleón desde su derrota en Waterloo hasta el claustro de Santa Elena. Por su carácter pionero, William J. Humphrey merece iniciar el listado.
Albert Deiudonné
Actor francés al que le tocó interpretar la última gran película muda sobre Napoleón: un clásico considerado vanguardista por el uso de técnicas novedosas como cámara subjetiva, cámara en mano, cámara bajo el agua y una escena final que estrenaba el sistema Polyvision, que ofrecía sensación de imagen panorámica total al proyectar en forma simultánea tres rollos de película.
Dirigido por Abel Gance y estrenado en 1927, Napoleón es un filme que cubre la primera parte de la vida de Bonaparte, con su ascenso en la carrera militar, su papel en la revolución francesa y los inicios de su campaña en el norte de Italia. La idea era que fuera la primera de seis películas, pero los exorbitantes costes no hicieron posibles las restantes (recordemos que dos años después el mundo se vio sacudido por el crack de Wall Street).
La caracterización de Albert Deiudonné como un Napoleón de indómita melena quedó marcada no solo para el público, sino también para el propio actor, de quien se dice que acabó mimetizándose con su personaje al punto de creer que era él. No sabemos qué tan cierto sea, pero sí que después de la película se dedicó a dar conferencias sobre el célebre militar francés.
Charles Boyer
Reconocido actor francés que supo pisar fuerte en Hollywood. Interpretó a Napoleón en María Walewska, película de 1937 que, dirigida por Clarence Brown, tenía en su papel principal a la legendaria Greta Garbo dando precisamente vida a la aristócrata polaca que da nombre al filme y con quien Napoleón tuviera un hijo ilegítimo mientras estaba casado con Josefina.
La designación de Charles Boyer para el papel tuvo que ver en gran medida con su origen, no obstante lo cual él manifestó que “ninguna actuación de Napoleón Bonaparte, por más perfecta que sea, sería satisfactoria para el público francés”. Sin embargo y a pesar de sus reservas, la película fue muy exitosa en Europa y particularmente en Francia, incluso más que en Estados Unidos, donde de todas formas su elogiada actuación le valió ser nominado al Oscar.
Marlon Brando
Por alguna razón, la película en que el prestigioso actor interpretó a Napoleón es poco recordada. A decir verdad, tampoco es demasiado buena. Desirée, de 1954 y dirigida por Henry Koster, está basada en una novela romántica y, como tal, privilegia una historia sentimental de dudosa veracidad histórica en la cual el gran militar habría estado durante toda su vida enamorado de Désirée Clary, la humilde muchacha con la cual quería casarse de joven, pero compromisos y alianzas políticas lo impidieron en aras de privilegiar el matrimonio con Josefina.
Ojo: algo de cierto hay porque esa joven existió, aunque no era tan humilde sino de origen burgués y acabó siendo reina de Suecia y concuñada del propio Napoleón (su hermana se casó con el famoso “Pepe Botella”). Pero no hay evidencia de que, como muestra el filme, él haya quedado obsesionado con ese amor juvenil por el resto de su vida.
Marlon Brando compone a un Napoleón más autoritario que los anteriores, a la vez que contradictorio y atrapado en la disyuntiva entre su ambición y su corazón. A pesar de que el personaje principal del filme no es él sino ella (interpretada por Jean Simmons), Brando hace un gran trabajo y da a su Napoleón rasgos propios y distintivos. Aun así, la Academia de Hollywood le pasó de largo: la película tuvo nominaciones en dirección artística y vestuario, pero no en actuación.
Herbert Lom
El actor de origen checo fue el primero que, en la era del cine sonoro, repitió papel con Bonaparte. Lo interpretó en 1942 en el filme británico El Vencedor de Napoleón (Carol Reed, 1942) y lo volvió a hacer catorce años después en la producción italoestadounidense Guerra y Paz (King Vidor, 1956) que, basada en la célebre novela de León Tolstói, es sin duda la más recordada de la dos, además de ser su actuación mencionada muchas veces como una de las mejores composiciones de Bonaparte, si no la mejor.
Con un costo de seis millones de dólares, exorbitante para la época, el filme era, por lo menos hasta entonces, uno de los más caros de la historia, incluyendo su impresionante elenco coral a Henry Fonda, Mel Ferrer, Vittorio Gassman, Anita Ekberg y, en el rol principal, a Audrey Hepburn como Natasha Rostova, (papel por el que cobró 350.000 dólares, convirtiéndose en la actriz mejor paga hasta esa fecha).
A pesar del reparto y la descomunal producción, la película pasó sin pena ni gloria por los cines de Estados Unidos y Europa Occidental aunque, de manera inesperada y en plena guerra fría, fue un éxito arrollador en la Unión Soviética.
Rod Steiger
Como su nombre lo indica, la producción italosoviética Waterloo, de 1970, recrea fundamentalmente clima previo y desarrollo de una de las batallas más célebres de la historia que, además, decidió el ocaso final de Napoleón.
El director ruso Serguéi Bondarchuk tenía ya ganado prestigio en su cinematografía de origen por haber rodado su propia versión de Guerra y Paz que, estrenada en 1966, se había convertido en la película más cara de la historia con siete años de rodaje, ciento veinte mil extras en una única escena y un metraje de… 403 minutos (!!!). Ello le convertía en todo un especialista en la materia y candidato ideal para rodar Waterloo.
Rod Steiger era para entonces un actor versátil de rutilante carrera en Hollywood, pero que había migrado a Europa en busca de papeles más exigentes. Aun cuando Waterloo sea básicamente una película militar y, como tal, apunte más a los avatares bélicos que a desarrollar personajes, Steiger entrega un trabajo memorable con la ayuda del buen ojo del director que sabe explotar sus dotes con primeros o primerísimos planos.
Lamentablemente y pesar de la producción de Dino De Laurentiis y de un costo de 25 millones de dólares, la taquilla no acompañó…
James Tolkan
Primer actor del listado que sigue vivo al momento de escribir esta nota. Aun cuando La Última Noche de Boris Grushenko (1975) tenga a su director Woody Allen y a Diane Keaton en los papeles principales, el aporte de James Tolkan recreando al emperador no es menor, sobre todo porque la escena en que la pareja trata de asesinarlo es de lo mejor de la filmografía de Allen.
El filme es homenaje y a la vez parodia a la literatura rusa, especialmente a Dostoyevski y Tolstói. Cuenta la historia de un ciudadano ruso bastante cobarde que termina, sin embargo y por imperio de las circunstancias, convertido en héroe anónimo y participando junto a su esposa en un complot para asesinar a Napoleón. Obedeciendo al carácter paródico del filme, el militar francés es recreado como mujeriego, seductor y algo ridículo.
Ian Holm
Otro que lo interpretó dos veces. El gran actor británico que nos dejara tres años atrás (aquí nuestro artículo publicado en ese momento) encarnó a Napoleón por primera vez en Los Bandidos del Tiempo (Terry Gilliam, 1981). Su participación allí, aunque breve (aparece en el primero de los viajes temporales), es muy recordada al componer a un Bonaparte de temperamento infantil que no para de reír y está más interesado en su función de marionetas que en la batalla que se está librando por la ciudad de Castiglione.
Viente años pasaron para que Ian Holm volviera a darle vida, otra vez en tono de comedia satírica, en Mi Napoleón (Alan Taylor, 2001), con una historia imaginaria en la cual un grupo de leales súbditos urden un plan para sacarlo de su reclusión en Santa Elena y llevarlo a París a los fines de restablecerlo en el poder tras dejar un doble en la cárcel que, en definitiva, será quien termine muriendo en su lugar para engaño del mundo.
De acuerdo a ello, el verdadero Napoleón estaría enterrado en París bajo otra identidad: es un gran y soberbio disparate, desde ya, pero es bueno aclararlo porque siempre están los conspiracionistas que toman ese tipo de cosas en serio.
Danny DeVito
Segundo del listado que sigue vivo. Se dice que Napoleón era de baja estatura, aunque algunos lo discuten. Sea como sea, alguien pensó en Danny DeVito y estoy seguro que pocos recuerdan su interpretación.
Es que el suyo es un caso especial por tratarse de una actuación dentro de otra, ya que en realidad hizo de un actor que hacía de Napoleón en Cómo conquistar Hollywood, gran película de Barry Sonnenfeld del año 1995 (conocida en América Latina como El Nombre del Juego), basada en una novela de otro grande: Elmore Leonard.
Se trata básicamente de una comedia de gangsters en la que DeVito interpreta a una ficticia estrella de Hollywood llamada Martin Weir que, justamente, está rodando el papel principal de una película llamada Napoleón. El dato más llamativo, a la luz del estreno inminente del filme de Ridley Scott y Joaquin Phoenix, es que el póster que promociona la película es casi idéntico al que aparecía en Cómo conquistar Hollywood promocionando la Napoleón ficticia.
Daniel Auteuil
Tercero del listado que sigue vivo. Hacia finales de los noventa, este gran actor francés se preparaba para interpretar a Napoleón en una producción americana titulada Betsy, que narraría la historia de su último amor en Santa Elena.
Finalmente la película no se hizo, pero su entrenamiento le sirvió cuando unos años después fue convocado por el director italiano Paolo Virzi para interpretar al célebre militar en N. Napoleón y Yo, adaptación de una novela de Ernesto Ferrero (fallecido hace escasos días) que giraba en torno al exilio de Bonaparte en la isla de Elba, trabando allí particular amistad con un joven veinteañero al que han designado como su bibliotecario y que, habiendo sido admirador suyo en el pasado, le recrimina ahora haber traicionado los ideales revolucionarios.
La película se estrenó en 2006 y se pueden establecer paralelismos con El Cartero (Michael Ratford, 1994), en que un exiliado Pablo Neruda se hacía amigo del encargado de llevarle la correspondencia en una pequeña comunidad italiana. Sin embargo, el tono general del filme apunta más a comedia de enredos y, compartiendo cartel con Elio Germano y Monica Bellucci, Daniel Auteuil interpreta a un Napoleón cansado, mal afeitado y con unos cuantos kilos de más, sumado al particular detalle de que le oímos hablar en italiano.
Desde ya que nos han quedado muchos afuera por la imposibilidad, mencionada al principio, de abarcarlos a todos. Además, y si bien este es un listado únicamente dedicado a quienes interpretaron a Napoleón en el cine, es justo también recordar a algunos que hicieron grandes trabajos dándole vida en producciones televisivas, ya sean películas o miniseries, como Trevor Howard, Armand Assante, Christian Clavier, David Swift y Tom Burke, entre muchos otros…
Interpretar a un personaje histórico como Napoleón debe ser, para cualquier actor, una de esas experiencias que dejan marca por la carga que conllevan. Ya lo dijo Daniel Auteuil: “En el fondo es el hábito el que hace al monje. Interpretar a Napoleón te marca de tal forma que, desde que grabamos, nadie me ha vuelto a llamar por mi nombre y mi perro se ha convertido en el perro de Napoleón”.
Por cierto y aunque parezca mentira, muchos actores han recibido premios por interpretar al personaje, pero ninguno el Oscar: solo la nominación de Charles Boyer, finalmente sin estatuilla. ¿Será Joaquin Phoenix quien acabe con ello? Por lo pronto, todas las miradas están puestas en él y en el estreno de este viernes.
Hasta pronto y sean felices…