Ya tenemos las novedades del mes de julio de 2020 de Minotauro. Los mejores libros del género en español.
El pdf después del texto que nos ha facilitado la editorial.
Buenas,
Poniendo rumbo a un verano atípico, es el turno de informar sobre las novedades de Minotauro para junio. Por fin llegará Infierno, el final apoteósico de la trilogía de vampiros de Carlos Sisí, Rojo. El Año Bradbury seguirá dándonos alegrías con la miniserie Green Town y una edición conmemorativa: Crónicas Marcianas 100 Aniversario. Minotauro Esenciales y las Bibliotecas de Autor ofrecerán más lanzamientos potentes: Mercaderes del espacio de C. M. Kornbluth y Valis y Cuentos Completos III de Philip K. Dick.
En el apartado de Fantasía, continuará la exitosa reedición de La Rueda del Tiempo y se sumarán dos libros de Warhammer. Finalmente, los fans de Juego de Tronos podrán disfrutar de una completa guía sobre la mitología que hay detrás de la saga creada por George R. R. Martin.
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Un saludo y sed felices
Hola Mario, qué tal?
Imposible leer ciertos títulos sin emocionarme: La Paja en el Ojo de Dios, Remedio para Melancólicos, Crónicas Marcianas, Mercaderes del Espacio, Ubik… casi se me cae una lágrima: son los libros que prácticamente me marcaron a esa edad en que las cosas verdaderamente te marcan: entre los 15 y los 18 años.
Muchas gracias por el artículo Mario! Que estés bien!
Te digo más. Esos libros, en aquellas ediciones de Minotauro, los compraba en las librerías de Avenida de Mayo en Buenos Aires. Aquí en Argentina había toda una tradición de que los dueños de las tiendas de libros eran la mayoría de las veces de la comunidad española; luego fue ocurriendo que, bueno, ya no hubo nuevas oleadas inmigratorias y, por lo tanto, los que había ya no viven o bien están largamente jubilados; por otra parte, esas viejas tiendas de libro (que olían a libro y a piso de madera) fueron desapareciendo, absorbidas por las grandes cadenas industriales (que huelen a perfumes y plástico). Así que al leer esos títulos es inevitable que venga a mi mente el recuerdo del olor a libro de esos locales así como el acento siempre español del hombre que atendía (que en el noventa por ciento de los casos era también el dueño).