Sallybooks nos trae un nuevo comic de unos artistas españoles, Progenie, de Javier Marquina y Jaime Infante. En este caso estamos ante una historia de ciencia ficción pura y dura donde Marquina toma prestado algunos elementos de Y: El último hombre y Alien para ofrecernos un relato apasionante que es imposible dejar de leer.
Progenie nos presenta el futuro de un planeta Tierra en el que un virus ha convertido a los hombres en monstruos sedientos de sangre y sólo las mujeres han logrado sobrevivir para crear una prospera sociedad. Están a punto de abandonar el planeta debido a un aumento de radiación solar que hará inviable la vida. Pero uno de los bienes más preciados de esta nueva civilización femenina, un depósito de semillas humanas necesario para que la especie pueda seguir existiendo, se ve amenazado. Es entonces cuando el brazo armado del Concilio de Madres, las Gorgonas, se ve obligado a intervenir.
La gran protagonista de la historia es Etiopía, líder de las Gorgonas y personaje que recorre el típico camino del héroe para acabar siendo algo mucho mayor de lo que era al principio. Le acompañan sus dos lugartenientes, Frisia, una cíborg muy poderosa y Bactria, el típico personaje “molón” que con su rebeldía y actitud ante la vida supone un contrapunto perfecto a la recta Etiopía.
Al principio de la historia Etiopía se muestra como el perfecto soldado. Una máquina de matar que no tiene dudas a la hora de obedecer las órdenes del Concilio de Madres, el órgano rector de esta sociedad matriarcal y que está formado por las ancianas y más sabias mujeres de la ciudad. Por eso no duda en abandonar a su pareja una vez más cuando el Concilio le pide que investigue con su escuadrón un semillero con el que se ha perdido contacto justo cuando se esta preparando el éxodo espacial y esas semillas son más necesarias que nunca.
Esta claro que la idea del virus que solo afecta a los hombres viene de Y: El último hombre, pero Marquina lo lleva la extremo, no solo matando a los varones, sino convirtiéndolos en monstruos sin mente a los que las mujeres deben enfrentarse. Es decir, la lucha de sexos llevada al extremo. Pero la historia va más allá, presentado unos momentos realmente tensos cuando la investigación en el semillero acaba convirtiéndose en una batalla por la supervivencia.
Cómo buena historia de ciencia ficción, Progenie permite a Marquina reflexionar sobre varios temas interesantes sin olvidar nunca que la principal función de este tomo es entretener. El autor nos presentar su idea de lo que seria una sociedad futura formada sólo por mujeres, y como cabía de esperar, con los mismos fallos que tiene la sociedad actual. Se aleja totalmente del ideal típico de “si las mujeres mandarán el mundo estaría mejor” y eso es algo que en mi opinión da mayor realismo al relato. La necesidad de que la historia avance hacia su conclusión hace que el autor no disponga de más tiempo para desarrollar todas las ideas que quedan flotando en torno a esta nueva organización social, que apunta temas muy interesantes que quedan en el tintero. Es una verdadera pena.
Por lo que he comentado el ritmo del relato es un poco irregular, acelerándose hacía el final de la historia, pero Marquina tira de oficio para que esto no suponga un problema y nos presenta un relato interesante, con notas muy originales como la evolución del lenguaje del futuro (al más puro estilo un Mundo Feliz). Tanto los momentos más introspectivos como la acción está muy bien llevada, aprovechando el autor para ir introduciendo elementos en la trama que enriquecen el conjunto de la obra.
En lo gráfico, el trabajo de Jaime Infante ofrece luces y sombras. Sus diseños de personajes y de ambientes son bastante buenos, así como la fuerza que logra imprimir a sus lápices en las escenas de acción. El problema es que usa una línea demasiado gruesa y eso hace que algunas escenas queden más confusas de lo que deberían. Sobre todo, cuando la sangre salpica las páginas, ofreciendo unas composiciones demasiado emborronadas no llegando a ser todo lo épicas que podrían. El acabado final también podría estar un poco más definido pero a pesar de todo, el resultado es bueno ya que, tanto por encuadres y composición como por estilo, Infante potencia lo contado para dotar de mayor énfasis a la trama.
La edición de Sallybooks es tan buena como de costumbre. La obra está recogida en un tomo en tapa dura de 140 páginas a un precio de 18 euros que se complementa con un excelente epílogo a cargo de Toni Fejzula y una galería de ilustraciones a cargo de Xavi Juan, Marcos Abel, Víctor Camacho, Carlos Moran, Joe Bocardo y el propio Jaime Infante.
En resumen, Progenie tiene las justas dosis de acción y de giros de guion para ser interesante durante todo el relato por lo que recomiendo que os acerquéis a este tomo con la mente abierta, sin pensar en que puede ser “propaganda feminista” ya que lo que sus páginas esconden es una gran historia de ciencia ficción en la que sus autores logran dar con la tecla justa para ofrecer una trama interesante que lleva a reflexiones más profundas.