Esta semana se ha presentado el tráiler de Slender Man, el famoso personaje de Internet nacido en un foro de leyendas urbanas. Muchos dicen que, ciertamente, es tarde para sacar adelante la película, pero aquí está 9 años después de nacer y nos deja un tanto fríos. Su propuesta podría estar de lo más interesante y así lo han conseguido sus dos videojuegos, el segundo más al explorar a fondo el personaje, pero hace años.
Slender Man es viejo, demasiado para que los que se consideraron fans del personaje quisieran volver a una sala de cine a ver cómo Hollywood explota un producto trending de hace casi una década, y también para que los nuevos seguidores de este tipo de historia vean algo interesante en ese hombre larguilucho con traje. Por eso, hoy voy a hablar de por qué la cinta del personaje es una mala idea en 2018.
Antes que nada os recomiendo leer el artículo de Las cosas que nos hacen temblar de mi compañero Jaime donde habla del personaje.
Slender Man, un concepto que no casa con un largometraje
Que ningún fan se queje de que llamo viejo al personaje porque yo fui seguidor de sus “historias” hace casi 10 años. Slender Man está anticuado como concepto de terror. La fortaleza del personaje se encontraba en no saber quién o qué se encontraba bajo esa tela blanca, qué eran esos tentáculos y de haber sido un hombre, cuál era su historia. La cinta de este año está hecha simple y llanamente para los fans que lo conozcan y que no esperan que estas preguntas sean respondidas en ella, cosa que no a todo el mundo gustará.
Sin embargo, ya no es solo que el concepto del personaje no case bien con una cinta sino que tampoco es un personaje llamativo para el terror del séptimo arte, en videojuegos sí. En su críptico tráiler podemos observar que al igual que en la historia de Internet y los videojuegos, Slender Man rapta a los niños y a los que no consigue llevarse, los trastorna psicológicamente hasta la muerte. Si recordáis (los que conocéis al personaje), Slender es un ser paranormal que no hace ningún movimiento hasta que alejas la mirada de él. Este aspecto del personaje se hizo canon a raíz del videojuego de 2012 por un concepto puramente técnico y es que el estudio detrás del título, Parsec Productions, no contaba con los medios suficientes como para crear el movimiento del personaje así que decidieron hacer que cambiara de ubicación de manera aleatoria cuando el jugador apartaba la vista.
Esto es sumamente difícil de llevarse a la gran pantalla y que sea mínimamente atractivo para el público joven que busca jumpscares y al que va dirigido la cinta. Quizá un enfoque al terror psicológico sería la apuesta más sensata.
Un personaje popular, hace casi 10 años.
Muchos usuarios en YouTube comentan la increíble tranquilidad que la gente de Sony Pictures se ha tomado a la hora de llevar a buen puerto esta cinta y es verdad. El personaje dio comienzo a una nueva etapa para estas leyendas urbanas gracias a la plataforma de vídeo de Google. YouTube ayudó a que se conocieran más estas historias y las abrió al mundo, traspasando fronteras y llegando a otros países.
Slender Man, The Rake, Jeff the Killer, etc. son solo algunos de los nombres de estos personajes terroríficos de Internet que se expandieron más allá de los foros, pero de eso hace ya 8 años. El panorama actual de estas leyendas urbanas es mucho menos interesante y el público menor. Puede sonar a habladurías de un viejo de otra generación, pero estas historias, estas creepypastas, se han rendido al espectáculo y al entretenimiento en lugar de ver hasta dónde se podía llegar con el boca a boca estas historias creadas por usuarios normales y corrientes.
Se avecina terror simple
Seamos realistas, Slender Man tiene un tufillo de cinta mala para pasar la tarde que echa para atrás. Ese submundo de Internet, plagado de leyendas y relatos terroríficos, siempre me ha sido muy llamativo. Quizá era porque esas historias salían de la mente de simples usuarios y se moldeaban gracias a la aportación de decenas de personas. Sin embargo, quitando la posible caracterización, esperemos que sobresaliente, del artista patrio Javier Botet, el resto del equipo técnico es de lo menos conocido del panorama cinéfilo actual.
Un director poco llamativo, un reparto de caras desconocidas y que tampoco parece que vayan a sorprender, una compañía que apuesta por el cine de terror como si le fuera la vida en ello a pesar de contar con éxitos como Get Out o Whiplash, que de terror tiene poco… Slender Man no tiene todo a su favor, pero quizá tampoco quiere tenerlo y ser una más.
Slender Man, en lo personal, está en el limbo. Por un lado puede amasar un gran éxito y convertirse, al igual que la historia base, en la puerta a posteriores adaptaciones de estas historias. Pero por otro, la cinta llega tarde, bastante. Si su estreno se hubiera dado en 2011, con el boom del personaje, habría sido un éxito independientemente de la crítica. Ahora solo falta esperar y ver si gana la nostalgia o el aburrimiento.
Yo creo que hay que darla una oportunidad. A lo mejor , te equivocas y sale bien.