Bienvenidos un sábado más a la sección de los amantes del cómic. Bienvenidos a “El cómic de la semana”. Hoy destacamos Baños Pleamar. Al final del artículo tendréis la portada y el enlace.
Muy buenas, hoy os traigo la reseña de un cómic al cual tenía muchas ganas de hincarle el diente. Baños Pleamar, de Isaac Sánchez, es un recorrido por los recuerdos del autor en la época en la que la familia regentó dicho local. Sin más dilación nos ponemos al lío.
¿Quién es Isaac Sánchez?
El cómic está escrito y dibujado por el badalonés Isaac Sánchez. Nacido en 1981, se inicia en esto de la historieta en 2009 con El regreso del hombre pez, donde se adentra en la mitología cántabra, Liérganes para ser más específico. La obra fue galardonada con el premio Josep Coll en el Salón Internacional del Cómic de Barcelona.
La caja de Basilio (2010) será su segundo cómic y tras el hace una parada de varios años.
Taxus será su vuelta al cómic. Está compuesta por tres capítulos: El último en llegar (2017), La cabra (2018) y Lo que dejamos atrás (2019). Para este proyecto, el autor se inspiró nuevamente en la mitología cántabra, además de criaturas del folklore gallego y astur.
En 2020 conquista a crítica y público con El don, ambientado en un barrio obrero del municipio de Alcorcón, en Madrid. El cómic fue premiado como “Mejor Cómic” por el por el Gremio de Librerías de Madrid.
Y finalmente nos llega su obra más intimista, Baños Pleamar, que a estas alturas de mi reseña serán pocos los aficionados al cómic los que no habréis oído hablar de ella.
Y si, es tambíen el personaje conocido como Loulogio, pero como yo no lo conzoco me ciño a su parcela de historietista.
La vida familiar en unos Baños a principios de los 90 en Badalona.
Baños Pleamar tiene un epílogo precioso. Unas últimas páginas conmovedoras en las que el autor se sincera. Y acaba con una frase que a mí personalmente me encanta:
“Es lo que tenía que ser, cuando tuvo que ser. Yo no he hecho nada”.
Al parecer Isaac tenía pensado Baños Pleamar desde que empezó en esto del cómic pero lo tenía guardado para cuando alcanzase la madurez artística y narrativa que la idea implicaba. No obstante las cosas suceden cuando tienen que suceder y Baños Pleamar llega en el momento adecuado.
Este cómic es una obra muy personal e íntima, como dice el artista, no está basado en hechos reales sino que son recuerdos. Y la verdad, es la mejor reseña que se podía hacer del cómic en tan pocas palabras.
La ambientación tiene lugar en Baños Pleamar. Estos Baños funcionaban como lugares de ocio con piscinas y restaurante que estaban a pie de unas playas que debido a la alta contaminación industrial hacían imposible el baño en la misma.
Veremos el día a día de Isaac de niño en este local. Una familia muy unida, trabajadora, y con muchos sueños, algunos frustrados y otros por cumplir.
Principalmente los protagonistas vistos a ojos del niño, son sus padres, Andrés y Palmira. A lo largo de la historia vemos como el la enamoró. De joven era un cantaor flamenco que iba a cantarle a ella, una monja hija de falangistas. Un día ella decide escaparse del convento e irse con él.
Como decía Baños Pleamar va de sueños y la madre de Isaac se fugó por unos sueños que ahora cuando trabaja en los Baños no ve cumplidos. Es sin duda un personaje muy bien trazado y con mucho cariño.
El padre por su parte es más risueño, siempre contando batallitas alegrando la mesa de los comensales. El sabe que la vida da lo que da, golpes buenos y malos y toca convivir con ello.
Respecto al estilo hay que destacar que Isaac se adecúa a la historia por lo que veremos varios cambios de registro gráfico y narrativo según demande la historia.
La cultura popular reflejada en Baños Pleamar.
Uno de los aspectos que más me ha gustado de la obra es ver reflejada la cultura popular de esos años. A través de los ojos del Isaac niño veremos su gusto por las Tortugas Ninja, viendo el niño la serie de animación y apareciendo en la tele en un momento dado los villanos, Bebop y Rocksteady. También con esos muñecos de dinosaurios o los Masters del Universo. Y como no, la televisión de los 90 con Jesús Puente y Lo que necesitas es amor. Y la escena de la hermana con el VHS de Perseguido de Arnold Schwarzenegger me ha emocionado, y de eso trata el cómic al fin y al cabo de emociones y recuerdos.
Valoración final.
Hace meses que salió esta joya. Cuando se anunció, ya me pareció muy interesante. Me gustan las historias retrospectivas, familiares, hechas desde los recuerdos más íntimos. Baños Pleamar no es una historia en consecuencia lineal. Está estructurada en base a historias cortas y a veces inconexas. Son anécdotas y recuerdos de Isaac de su época de niño en esos Baños. No son historias forzosamente reales, ya que están basadas en recuerdos y los recuerdos tienden a idealizarse.
Las últimas páginas con el Isaac hombre son de una emotividad enorme. Una carta de amor a su padre y a su familia donde el autor se abre ante todos nosotros.
Este cómic decía el autor que llegaría cuando tuviese que llegar y si, este era el momento. Baños Pleamar es una joya para el lector pero sobre todo es un hermoso legado de Isaac para con sus padres y familia. Un cómic con el que he reído, y mucho, y con el que seguramente habré llorado también.
Descripción:
Después de sorprendernos, hipnotizarnos y divertirnos con dos best-sellers como Taxus (2017- 2019) o El Don (2020), Isaac Sánchez vuelve a la carga con una nueva novela gráfica en la que ha estado trabajando durante los dos últimos años de su vida, pero para la que lleva preparándose desde siempre: Baños Pleamar. Se trata de una propuesta introspectiva e intimista en la que el lector se verá transportado a una época que ya no existe, a un pasado creado a través de la exactitud de los recuerdos de un niño y las historias contadas boca-oreja. Una historia desgarradora y cruda por momentos que, a través de su ritmo, conseguirá emocionar y estremecer al lector. Una de las obras del año.
Badalona, años 90. Ante la contaminación de sus playas floreció un singular tipo de negocio llamado «Baños» que aunaba a pie de costa restaurante y piscina. Espacios pantagruélicos que dotaron de vida a unas afueras antaño desamparadas. Esta es la crónica de uno de esos insólitos recintos. La historia de «Baños Pleamar».
A continuación os dejo el enlace a la editorial y la portada editada por Dolmen Editorial.
Un saludo y sed felices.