Ant–Man y la Avispa: Quantumanía da el pistoletazo de salida a la Fase 5 del UCM. Después de una Fase 4 algo descafeinada, había curiosidad por ver que nos ofrecía Kevin Feige. Ya circulaban por internet muchos agoreros vaticinando el fin del género de superhéroes y el agotamiento del UCM. No va ser el caso de este post.
Viajando al Mundo Cuántico
La premisa argumental de Ant–Man y la Avispa: Quantumanía es simple y ya la vemos en el tráiler. Un experimento de Cassie Lang (Kathryn Newton) sale mal y todos acaban en el Mundo Cuántico, a donde ha llegado Kang (Jonathan Majors), quien ha conquistado todo lo conquistable. No queda otra que enfrentarse a él e intentar regresar a casa.
Si en las anteriores entregas del personaje nos encontrábamos ante una mezcla de géneros, con los superhéroes por un lado y las películas de ladrones por otro, en esta nueva película se ha abandonado esa premisa y la aventura superheróica predomina al cien por cien. En este sentido Ant–Man y la Avispa: Quantumanía es puro Marvel, aunque algo del encanto de lo novedoso se ha perdido por el camino.
Se trata también de una película más coral. No sólo son las aventuras de Scott Lang (Paul Rudd) y Hope Van Dyne (Evangeline Lilly) sino también las de Cassie, las de Hank Pym (atención a su escena liderando a las hormigas cuánticas, otra vez puro Marvel) y las de Janet Van Dyne. El protagonismo se reparte entre todos por igual y en ese sentido sorprende ver como actores de la talla de Michael Douglas y Michelle Pfeiffer se han adaptado totalmente al UCM, asumiendo sus roles y no haciendo ascos a las pantallas verdes.
Bienvenido, Kang
En cuanto al villano de la función tenemos a un muy, muy inspirado Jonathan Majors. Este Kang da más miedito que el que vimos en Loki y apunta maneras. Puede que Marvel haya encontrado el hilo conductor de la Fase 5 que no vimos por ningún lado en la fase anterior porque la historia de Kang no termina aquí sino que acaba de empezar. Ant–Man y la Avispa: Quantumanía no es una película de origen pero si un punto de arranque de algo que se viene grande. O eso pretenden.
Punto y aparte merece M.O.D.O.K, personaje que aquí queda reducido al antagonista chungo / cómico. Su parte freak ha sido contrastada por ese humor marca de la casa que a tantos Jorge de Burgos molesta. No es mi caso y más si tenemos en cuenta que siempre ha sido un personaje que no había por donde cogerlo (hablamos de una enorme cabeza que flota; nuff said).
Hay que destacar también uno de los puntos fuertes de la película, la re-creación de ese Mundo Cuántico que apenas vislumbramos en películas anteriores. El diseño de escenarios, personajes y criaturas es apabullante. Miremos a donde miremos, en cualquier punto de la pantalla hay un nuevo alien, un nuevo concepto. Sorprende que aquí hayan conseguido ese ambientazo y que en Dr. Strange en el Multiverso de la locura se quedasen tan, tan cortos a la hora de recrear esos multiversos.
Esto es Marvel, le pese a quién le pese
Permitidme ponerme en plan reivindicativo (y si no me lo permitís me da lo mismo porque me voy a poner reivindicativo igual). Juanma Martín subtitulaba su crítica de Dr. Strange en el Multiverso de la locura con un Mucha magia visual para esconder la simpleza y yo me voy a apropiar del concepto porque aquí tenemos lo mismo, aunque la magia visual se ha incrementado.
La premisa argumental de Ant–Man y la Avispa: Quantumanía es simple, su desarrollo es simple y sus pretensiones son simples. Resulta muy entretenida (dos horas que pasan volando), espectacular y se ve como un eslabón más de la cadena del UCM. Eso está bien porque los superhéroes son así, por lo menos en el 99% de los casos.
Y es que por cada Born Again que hemos leído o por cada La última cacería de Kraven que se ha publicado, hemos tenido cientos, miles de historias que eran simple y pura diversión, que tan sólo pretendían que volvieses al quiosco al mes siguiente, que no pretendían ser una epopeya gloriosa y apocalíptica.
Es en ese sentido que Ant–Man y la Avispa: Quantumanía se erige como una película 100% Marvel, imbuida del espíritu de La casa de las ideas (chascarrillos incluidos, que anda que no hay en los cómics) y que los verdaderos creyentes deberían abrazar como un gran inicio de la Fase 5 (esas escenas post-créditos prometen mucho). Un saludo, sed felices.
Hola Pedro, gracias como siempre por tus completos artículos. Yo no me cansaré nunca de los superhéroes, desde pequeño soy un fan, y por cierto lo que ha conseguido Marvel en estos últimos años es inigualable, se han consolidado como una marca de prestigio, pueden haber producciones más flojas que otras, pero eso pasa en las mejores productoras. Marvel forever.
Quantumania es un ejemplo de que el futuro de Marvel está asegurado.
Un saludo y a disfrutar de las cosas que nos hacen felices!!
Hola Jordi. Siempre seremos fans de Marvel, aunque a veces les salgan producciones menos acertadas. Realmente, si cuando yo era joven me llegan a decir que vería estas películas, no me lo habría creído. Creo que muchos fans no valoran lo que tenemos ahora mismo, exigen y exigen y están más por criticar que por disfrutar. Gracias por tus comentarios y por leernos.
Hola Pedro, esta debe ser la única critica buena que he leído de esta película ya que la ponen a parir en todos los datos incluyendo YouTubers y demás. Espero verla y ver que tal ya que Black Panther Wakanda Forever no me pareció tan buena ni Black Adam tan mala.
Hola Juan. Si, hay mucho youtuber a la caza del clickbait (se dice así?). Y es que poner a parir a Marvel vende muchísimo, aparte de que quedas de pu.. madre porque no pareces un vendido. Ellos sabrán. De todas formas mi crítica no es la única positiva que circula por ahí. No me gusta hacerles propaganda pero, por ejemplo, en Espinof han venido a decir más o menos lo mismo que digo yo. Además, la valoración entre los usuarios está siendo mucho mejor que entre la crítica especializada. Ya nos contarás cuando la veas. Un saludo y gracias por leernos y dejar un comentario.