Hay ocasiones en las que una serie, sin tener una fuerte promoción ni hacer ruido, acaba atrayendo las miradas de un púbico cada vez más exigente que busca historias que sorprendan. Este ha sido el caso de Paradise, una serie de ocho episodios de más o menos una hora de duración que ya se pueden disfrutar al completo en Disney+ y que ha supuesto una de las grandes sorpresas en lo que llevamos de año.
Paradise es un thriller creado por Dan Fogelman, responsable también de una serie de culto como This is us, y que tiene como gancho un giro de guion espectacular justo al final del primer episodio. La sinopsis de Paradise es la siguiente: en una serena comunidad habitada por algunas de las personas más prominentes del mundo, la tranquilidad estalla cuando se produce un espeluznante asesinato y se desencadena una investigación de alto riesgo. Xavier Collins, jefe del Servicio Secreto de la Casa Blanca, es rápidamente investigado por la muerte del presidente, al que descubre junto a su cama.
La víctima es nada más y nada menos que el presidente de los EE.UU. y el principal sospechoso, el responsable de su seguridad. A priori parece lo suficientemente interesante para darle una oportunidad, pero todo parece indicar que estamos ante el enésimo thriller político. A esto hay que añadir que se emite en Disney+, plataforma que mucha gente no se toma en serio porque después de todo, solo sirve para ver productos infantiles o frikis derivados de Marvel o Star Wars. Error. En Disney+ hay magníficas series lejos de estos universos como por ejemplo The Old Man, Dopesick o la multipremiada The Bear, a las que se suma desde ya Paradise.
El gran aliciente para ver la que nos ocupa es que, tras su sinopsis poco original, se esconde una magnífica historia que va mucho más allá de lo que podíamos imaginar. El merito de su giro de guion está en que una vez que lo vemos, no podemos dejar de pensar que tiene toda la coherencia del mundo, ya que a lo largo del primer capítulo se presentan los suficientes indicios para que todo cuadre.
Esta sorpresa casi se podría poner a la altura de la que tiene Sugar, producción de Apple TV+ que también deja con los ojos abiertos al espectador. La diferencia es que, en esta, el giro de guion se da casi al final y sirve para poner la guinda a la trama mientras que en Paradise, ocurre al principio, cambiando el tono de la serie en general.
Es complicado hablar de esta serie sin hacer spoiler, pero quiero que si alguien lee este artículo sin haber visto Paradise pueda acercarse a ella con la mente abierta y dispuesto a sorprenderse. Lo bueno es que estamos ante una producción con muchas cosas buenas, más allá de ese giro de guion que hace que la investigación del asesinato del presidente se vea acompañada de unos elementos que hacen que la historia sea aún más apasionante.
Los actores que dan vida a los personajes hacen un trabajo sobresaliente. El primero de ellos es Sterling K. Brown que interpreta al agente Xabier Collins, gran protagonista de la serie y que también se lució en This is us. El peso de la serie recae en gran medida sobre él, luciendo un cambio de registro magistral para dar vida a un agente que tiene que proteger a una persona que no le cae bien y que tiene que hacerse cargo de una investigación que acaba destapando mucho más de lo esperaba. Sterling K. Brown logra en todo momento trasmitir al espectador los sentimientos de Collins, ofreciendo una intensidad perfecta cuando el agente tiene que hacer de tipo duro y a la vez una dulzura infinita en su papel de padre de familia.
También está brillante James Marsden dando vida al presidente Cal Bradford, un personaje que, aunque muere al final del primer capítulo, tiene gran importancia en la serie. Sin olvidar a Julianne Nicholson, Samantha Redmond, alias Sinatra en la serie, principal ayudante del presidente Bradford y verdadero poder en la sombra, un personaje que va cobrando más y más importancia en la trama. Por supuesto que hay muchos más personajes que sirven para dar forma a la historia y están también muy bien interpretados, pero al final todo acaba girando en torno a este trío y es gracias a su genial trabajo que la serie sea creíble.
Otro de los grandes alicientes de Paradise es la manera de contar la historia. La trama principal sigue la investigación del agente Collins pero, para dar contexto a todo lo que sucede, los guionistas hacen un uso genial de los flashbacks. Así vamos a poder conocer en profundidad el pasado de los personajes y el contexto general de la serie. Tampoco es que esto sea una novedad, ya que, por ejemplo, Perdidos hacía lo mismo. Pero el caso es que en Paradise acaba siendo tan apasionante el pasado como el presente por cómo se acaban relacionando las historias y lo bien hilvanado que está todo.
En cuanto al apartado técnico, solo puedo decir que es sobresaliente. La serie luce de maravilla, con un diseño de producción perfecto que sirve tanto para poner en contexto el escenario en el que viven los protagonistas como las diferencias que hay con respecto al pasado.
Mención aparte merece el apartado sonoro. La música original de la serie es maravillosa y el uso de las canciones como complemento de las historias está muy bien pensado, como por ejemplo las canciones ochenteras como hilo conductor de la relación entre el presidente y su hijo. Y lo mejor de todo, la secuencia del episodio final en la que vemos qué pasó realmente cuando asesinaron a Cal Bradford, totalmente muda y sonando solo los acordes de piano de Another Day In Paradise de Phil Collins, pura maravilla que sirve para enmarcar toda la historia de una manera redonda.
En resumen, Paradise es una de las mejores series de lo que llevamos del año (si no la mejor). Con el mérito añadido de ser una idea original. Estamos ante un gran thriller muy bien llevado, con una investigación apasionante que se ve enriquecida por el escenario donde trascurren los hechos y por unos personajes muy bien escritos e interpretados. Pero es que no solo hay que investigar un magnicidio, sino que hay que descubrir una serie de misterios que resultan aun mas apasionantes y hacen que el espectador se quede con los ojos clavados en la pantalla. Para terminar, la historia del asesinato queda resuelta, pero la serie ha sido renovada por una temporada más para solucionar los cabos sueltos que deja la historia y poder profundizar más en un universo maravilloso que, si aún no lo has hecho, ya estas tardando en ver.