Fue en 2021 cuando se estrenó la primera temporada de Los enviados, cuyo éxito hizo que se acordara una segunda, disponible desde marzo de 2024 en SkyShowtime, junto con la primera. La plataforma de streaming sigue afianzándose poco a poco, con series como Halo o La mujer en la pared, por poner ejemplos recientes, y ahora con esta serie española, vuelve a conseguir estar en boca de todos.
El dúo de sacerdotes protagonizado por Miguel Ángel Silvestre (Sky Rojo, La casa de papel, 30 monedas) como Simón Antequera y Luis Gerardo Méndez (Bandidos, Narcos: México) como Pedro Salinas, vuelve a ser enviado por el Vaticano a investigar un presunto milagro. Recordemos que ambos son los encargados de probar si un hecho, aparentemente sin respuesta lógica, es obra de la mano de Dios o se trata de un engaño.
En esta nueva temporada, que consta de ocho episodios, los enviados por el Santo Padre viajarán al norte de España, a un pequeño pueblo donde una monja ciega tiene visiones sobre hechos difíciles de explicar. Un lugar de la costa cantábrica donde la fe es practicada de forma fanática por un grupo de hombres que se creen con la impunidad de actuar bajo el respaldo divino, contra una alcaldesa (Pilar, Marta Etura) que intenta rescatar un pueblo hundido económicamente pero con una gran belleza turística.
En esta ocasión, se encontrarán con un cruel asesinato que hará que la tensa situación que se vive en el pueblo se complique todavía más, pillando a Simón y Pedro en mitad de este polvorín a punto de estallar.
Los enviados. Repasando brevemente la temporada 1
Antes que nada, vamos a hacer un pequeño repaso por la temporada 1 de Los enviados, estrenada en 2021. Consta de ocho episodios y en ella veremos al dúo protagonista justo en el momento en que se conocieron. El padre Simón será enviado por El Vaticano a un pequeño y remoto pueblo de México, y allí le estará esperando el padre Pedro. Ambos tendrán que probar si un sacerdote muy querido en la zona obra milagros o si todo es una farsa.
Poco después de llegar a su destino, el padre desaparecerá y empezarán a suceder hechos extraños en un convento donde el pasado tiene unas raíces demasiado oscuras. Al mismo tiempo, el padre Pedro experimentará, en primera persona, visiones perturbadoras que le harán cuestionar su misión en la vida.
Ayudados en la distancia por la intrépida Emilia (Assira Abbate), se sumergirán en una historia tenebrosa donde los recuerdos del pasado luchan por salir a la luz clamando justicia.
Una temporada 2 de Los enviados mejorada.
En esta recién estrenada temporada 2, el dúo de sacerdotes ya se conoce mejor y eso se va a notar. Su relación está más asentada y contribuirá a que el espectador vuelva a sentir la cercanía de la temporada 1, pero esta vez de forma más intensa.
Además, tenemos la suerte de ver a la hermana Emilia en acción. La joven actriz se ganó una participación más activa en la temporada 2, en la que investigará in situm junto a los dos sacerdotes los presuntos milagros, y he de decir que eso contribuye a que esta nueva tanda de episodios sea mejor que la anterior.
La trama vuelve a llevarnos al pasado de unos personajes a los que el tiempo ha castigado con remordimientos y que, por mucho que hayan intentado tapar, tal y como sucedió en la temporada 1 de Los enviados (y en la gran mayoría de series), siempre sale a la luz.
Si en la temporada 1 nos acercaban más a presentarnos la vida de Pedro, en esta será Simón quien tenga más interés. Aunque volveremos a tener las tenebrosas visiones del primero, pero no serán tan intensas como en la primera ocasión.
Esta vez, el misterio nos llega de manos de tres monjas, hermanas de nacimiento, que se quedaron ciegas la misma noche y que sienten una unión maternal con un hombre con problemas mentales al que el convento acogió cuando solo era un bebé.
Tendremos varias tramas que se irán desarrollando de forma separada, pero que es fácil de entrever que están relacionadas. Algo que contribuye a que Los enviados sea una serie ágil y entretenida de ver.
Un tándem protagonista que funciona.
Sin ninguna duda, una clave fundamental para el éxito de Los enviados está en sus protagonistas. El tándem formado por los dos sacerdotes funciona de maravilla, tanto que en algunas ocasiones se nota cómo las risas de complicidad y los diálogos son algo natural y no estaban escritos en el guion.
Esa complicidad entre ambos hace que la historia fluya de forma sencilla, incluso cuando nos están contando una historia con algún que otro agujero. La amistad entre los dos hombres hace creíble ambas tramas y les da ese suspense y misterio que hace que el espectador siga viendo Los enviados.
A ellos se une la hermana Emilia, que con su espontaneidad y desparpajo contribuye a que la serie no se estanque y sea amena de ver. Las bromas entre los tres son algo habitual y ese toque de humor leve acerca al espectador a este trío de investigadores fuera de lo normal.
Solo me queda por decir que si buscas una serie entretenida, con misterio y suspense, con algo de humor, una historia interesante que atrape y unos personajes entrañables, te recomiendo que le des una oportunidad a Los enviados.