Introducción
El 1 de diciembre de 2020 ECC Cómics publicó La Liga de la Justicia: Sin Justicia (Liga de la Justicia Saga – La Totalidad Parte 1). Justice League: No Justice fue la miniserie con la que, en 2018, se daba comienzo a la nueva etapa de la Liga de la Justicia tras unos años en los que la que debería ser la franquicia más importante de DC comics no había estado especialmente interesante. En este artículo, a modo de presentación, vamos a reseñar el primer número (de cuatro) para poder hacerte una idea de lo que te espera en el tomo.
El camino hacia Liga de la Justicia: Sin Justicia
Después de una buena etapa a cargo de Geoff Johns (con Darkseid War como magnífico colofón), las aventuras del grupo más importante en el Universo DC cayeron en las manos de Bryan Hitch. El dibujante, metido ahora a guionista, realiza un trabajo correcto sin más, alejado del aura de grandeza que Johns si había logrado anteriormente.
El siguiente en tomar los mandos de la colección fue un Christopher Priest que venía realizando un buen trabajo en la colección de Deathstroke. El problema es que al pasar a la que debería ser la colección principal de DC, el guionista se trae las tramas que ya venía tratando en su anterior trabajo y eso unido a su peculiar manera de contar las historias (con elipsis temporales y una narración algo farragosa) ha hecho que tampoco acabe de cuajar.
Visto lo visto Dan Didio y Jim Lee, jefazos de DC comics, han decido dar un volantazo a las colecciones de la Liga de la Justicia poniéndolas en las manos de Scott Snyder.
¿Qué nos vamos a encontrar en Liga de la Justicia: Sin Justicia?
¿Y qué nos vamos a encontrar en Liga de la Justicia: Sin Justicia? Pues Snyder toma como partida el final de Dark Metal. En dicho evento vimos como el muro de la fuente se rompía y el multiverso está desprotegido ante las amenazas que puedan surgir de esta nueva situación. Como nos comenta el propio Snyder “el Multiverso no ha sido más que una pecera, y ahora nosotros nos hemos tirado al océano, desatando terroríficas nuevas amenazas y maravillosas nuevas posibilidades”.
Parece que el nivel de los peligros va a tener una escala mucho mayor, algo que siempre le viene bien a las historias de la Liga, son los superhéroes más grande que existen, así que sus amenazas han de ser lo más grande posible y sus historias tienen que ser épicas (no hay más que recordar la añorada etapa del Grant Morrison al frente del grupo).
El primer número de Liga de la Justicia: Sin Justicia
El primer número de Liga de Liga de la Justicia: Sin Justicia nos presenta a Brainiac aliándose con los héroes y villanos del Universo DC para hacer frente a los Omega Titans. De esta alianza surgirán cuatro grupos, uno por cada Titan, compuesto por los personajes más acordes con la naturaleza de cada amenaza según Brainiac.
De momento este número sirve tan solo como presentación de los Omega Titans y los grupos que les van a hacer frente (con composiciones que van desde lo divertido, a lo bizarro pasando por lo inexplicable).
Valoración y cierre
Se puede criticar la idea de unir héroes y villanos pero la verdad es que tampoco es demasiado original. Hemos visto mil veces como se unen para luchar contra un peligro común superpoderoso. La gracia estará en cómo se interrelacionarán personajes tan dispares que nunca han trabajado juntos y como se resolverá la amenaza, lo que unido al cliffhanger final nos da como resultado un producto con la suficiente fuerza para que nos pique y gusanillo y queramos saber más.
De la parte gráfica (dibujo y color) se encarga Francis Manapul y como siempre nos presenta unos dibujos realmente espectaculares que sirven para resaltar el tono épico que Snyder quiere que tenga la historia (el principio con los Green Lanterns y el muro de la fuente roto sirve como ejemplo de la belleza visual del comic). En este sentido no hay ninguna queja posible ya que el trabajo de Manapul y su manera de aplicar el color sientan como un guante al tono de la historia. Mención aparte merece el trabajo del artista en el rediseño de los trajes de los protagonistas ya que cada grupo de la Liga tiene sus propios elementos y colores distintivos.