Saludos gente. En esta nueva reseña de cómic quiero hablaros de la interesante obra “Ars Magna” publicada de manera integral por la editorial Ponent Mon. Estamos ante una historia guionizada por Didier Alcante y dibujada con mucho esmero y detallismo por Milan Jovanovic. Como no es ningún secreto, ya que el propio guionista lo confiesa en el apartado de extras, y también se puede notar a lo largo de las páginas, Ars Magna está muy influenciada por la mítica película “En busca del Arca Perdida” de la saga de Indiana Jones (aquí podéis ver nuestro artículo dedicado a la valoración de las películas de la saga).
Hay que destacar en primer lugar el gran trabajo de documentación que ha requerido la obra, pues los autores se implicaron al máximo para recrear la ciudad de Bruselas de la década de 1940, ocupada por los nazis en plena Segunda Guerra Mundial. En ese aspecto, es espectacular el trabajo que hace Jovanovic a los lápices, con un nivel de detalle francamente fantástico, al estilo de un dibujante español que me gusta mucho como es Juan José Ryp. Ojo, no menos importante es la labor de Alcante, pues a lo largo de la obra se nota que hay detrás un buen trabajo de recopilación para hablar de personajes y sucesos históricos en general, y luego ya de forma particular ligados a la propia Bélgica. Fijaos hasta qué punto se logra convertir a la propia Bruselas en una parte más de la narración, que Ars Magna es recomendada por las autoridades locales para conocer la ciudad de una forma especial.
¿De qué va Ars Magna? Pues aquí os comparto la sinopsis oficial:
Bruselas, 1943. Un oficial de las SS llega a la casa del profesor van Kessel buscando algo importante. Sus hombres encuentran detrás de una pintura que encarna una acacia, «símbolo del conocimiento e iniciación a los secretos» y también “del renacimiento» una enigmática sentencia. Así se desata la resolución de una serie de pistas por las entrañas de la ciudad que conducirán al tesoro custodiado por una logia masónica, tras el cual se encuentra también un grupo de luchadores de la resistencia y un grupo de académicos. La poderosa y fascinante reliquia llamada “Fénix” traída de las cruzadas ha sembrado la muerte a través de los siglos y podría cambiar también el curso de la Segunda Guerra Mundial.
Como podéis comprobar, no estaba exagerando cuando mencionaba la influencia de Indiana Jones aquí. En distintos pasajes de la obra, me han venido a la mente no solo las historias del propio Indiana, sino también películas como “La búsqueda” protagonizada por Nicolas Cage, o “El código Da Vinci” donde Tom Hanks también descifraba enigmas que le conducirían a algo importante. Aquí tendremos como protagonista al personaje de Philippe Cattoir, profesor con conocimientos de la historia del país, que será ayudado por Sophie, una mujer que forma parte de la resistencia local que lucha contra los nazis. Y uno de los aciertos de esta pareja de personajes, es que Philippe es todo un cerebro, pero no es precisamente un personaje valiente y las veces en las que se ve inmerso en serios apuros no es el héroe, sino que será Sophie la que lleve la voz cantante en esa situación (ya sabéis que Indiana Jones reúne ambas cualidades, cerebro y valentía, cosa que aquí vemos repartida en dos personas), demostrando que es toda una luchadora.
Los personajes estarán inmersos en la búsqueda de ese artefacto que podría cambiar el curso de la guerra, al igual que lo estarán los nazis, ya que Hitler lo quiere. Y en el curso de dicha búsqueda, habrá diseminadas distintas pistas por la ciudad que dejó el último miembro vivo de la logia secreta que custodiaba el “Fénix”. Cada pista ofrecerá una parte de la historia del artefacto, desde su descubrimiento en plena Guerra de las Cruzadas, hasta los posteriores lugares donde se fue escondiendo para su custodia y estudio. ¿Quién logrará encontrar el artefacto? ¿Qué será realmente? ¿Servirá para decantar el curso de la guerra a favor de quien lo use? Son preguntas que descubriréis leyendo esta interesante y absorbente Ars Magna.
¿Merece la pena el tomo? Absolutamente SÍ. Vale que soy fan de Indiana Jones y ya en ese aspecto me tenía ganado, pero la historia está bien narrada, espectacularmente dibujada, y el ritmo no decae en ninguno de los tres capítulos que componen la historia. Aquí tenemos misterio, historia y aventuras mezcladas en un combinado que ha sido una grata sorpresa para leer. Mención aparte merece la fantástica edición de Ponent Mon en cartoné, reuniendo en un solo tomo los distintos capítulos de la obra. Hay un apartado de making off genial por todo lo que nos cuenta Alcante respecto a las motivaciones para escribir esta historia, el proceso de documentación que él y Jovanovic siguieron, y para deleitarnos con distintas imágenes de la obra en blanco y negro. Al final de esta reseña os dejo la ficha del tomo en la web de Ponent Mon.
Esto ha sido todo por mi parte, ¿ya habéis leído la obra? ¿Qué os parece? Hasta que volvamos a encontrarnos, sed felices.